Thursday, April 7, 2022

Este jueves, un relato: "Uno de diez" (mi participación)

 
 
 
 
"Entonces me pareció que era el momento oportuno para contárselo todo".  -¿Por dónde empiezo?

- Por el principio, claro. - me respondió  Agustín, mi marido. - Te escucho.

- Resulta que cuando iba al Shopping  me encontré con Filippa Oberstein ¿La recuerdas? Y bueno, decidimos ponernos al día mientras tomábamos un café.  Una cosa llevó a la otra. 

De pronto, callé.

(La cara de Agustín era de expectación)

-¿Y?

- Y resultó que se nos unió  Jean, "El negro".... compañero de trabajo de Filippa - continué con voz temblorosa- Nos pidió ayuda. Al parecer, según nos dijo,  unos hombres habían entrado a su apartamento la noche anterior.

- ¿Y por qué no acudió a la policía?

- Quería solucionarlo sin intervención policial. 

- ¡hmmm!... Esto no presagia nada bueno. Me parece muy raro. 

- Justamente, eso pensamos. Creímos  que ocultaba algo, así que decidimos investigar y lo seguimos. 

- ¿Y qué? 

-  Al día siguiente, después del trabajo Jean fue al muelle. Ahí estuvo mucho tiempo. Luego, tomó un linterna y subió a un yate y zarpó. No pudimos seguirlo, pero esperamos a que regresara.  El y unos estibadores descargaron unas cajas y las cargaron en un camión....

- Sigue, sigue...

- Bueno,  seguimos al camión. Faltó poco para que nos descubriera, pero logramos disimular y escondernos de sus miradas.  Descargaron las cajas en un galpón. 

- Me late que has visto mucho cine...

- ¡Qué no,   qué es verdad!, ahí fue cuando llegó la policía antinarcóticos.

- ¿En serio?
-  Se lo llevaron a "El negro" y a toda la banda de forajidos en una operación muy eficiente y  rápida. 

- ¿A dónde quieres llegar? ya me estoy cansando...

-  Que ahí voy, Agustín, nos llevaron como testigos. Y recién nos liberaron  hace un rato, por eso te dejé colgado en el restaurante   ayer,  justo en el aniversario de nuestra boda. 

- ¡Anda!, ¡Manda cojones!, que si no me quieres ya, encuentra otra forma más clara, creíble y directa  de decirlo, mujer.

 

 333 palabras

 

 Para acceder a la convocatoria, pulsar aquí 

 

 

 

 

 

 


26 comments:

manouche said...

Hay escusas que ne valen nada, mas sencillas mas credibles.....

Albada Dos said...

Hay mentiras rocambolescas, y hay verdades que no hay quien las crea. Muy bien narrado

Un abrazo

Emilio Manuel said...

Menudo royo se marcó la tía para justificar su olvido.

Saludos

Mascab said...

Me temo que esta excusa le ha sonado a cuerno quemado...jajajajaj
Muy bien llevado tu aportación, felicidades. Abrazo

Campirela_ said...

ajajajjajaj, me rio por ese final del marido ajjajajaja,
Si ella lo quiere dejar y se ha inventado toda esa movida desde luego es un crak ajajaa. La historia es genial con narcos por el medio y todo Un besote me ha gustado leerte y me has sacado la sonrisa del final ajja.

Noelia Cano said...

Jajaja Ese marido es muy ácido!! Aunque es verdad que la aventura era de película, pero oye, cosas que pasan.
Muy divertido.
Besos.

Lurio said...

Yo me lo habría creído con todas las letras, comas y pausas pero...¡estos incrédulos!

Neogeminis Mónica Frau said...

Jaja vaya excusa! Yo esperaba que inventara una abducción, o algo así...estuve cerca! Muy divertido, Myriam. Un abrazo

Luz said...

No sé 😁, yo me lo tomé en serio...
Super.
Abrazos

Ginebra Blonde said...

Ja, ja, ja… Bueno, a veces la realidad supera a la ficción, como suele decirse, así que todo es posible. En cualquier caso, si fue una invención, se lo curró, eh¿? Y eso tiene su mérito, ja, ja, ja…

Muy bueno, Myriam.
Un placer leerte.

Abrazo grande 💙

Myriam said...

HOLA A TODOS: Muchísimas gracias por vuestros cariñosos comentarios. Besos y abrazos a repartir.

Beauséant said...

una buena mentira tiene algo de verdad en su interior... y algunas verdades mucho de mentira envolviéndolas..

en resumen, qué cualquier sabe :)

Esther said...

jajaja ¿y por qué le tiembla la voz? ¿y dónde pasaron la noche las señoras? ¿En el coche? Ay que ver con la señora, y como es además de película pues ¿quién iba a ser el malo? Muy bueno.
Besoos.

María said...

Jajaja menuda excusa.

Buen relato, Myr, felicitaciones por la convocatoria.

Besos.

rodolfo said...

Bueno, quién sabe?, a veces la realidad puede ser más absurda que la ficción. Una vez vendieron una linea de tranvías a un millonario ( patán) previo paseo en el tranvia y vista la recaudación EN METALICO que hacía. Un abrazo

ɱağ said...

Una historia para, como se suele decir, "mear y no echar gota", y perdona por la expresión :-) :-) No hay por donde cogerla pero, ya se sabe que, a veces la mayor mentira resulta la mayor verdad, más por lo que se calla que por lo que se dice :-)
Un beso enorme, Muy.
Feliz fin de semana.

Myriam said...

A TODOS: Nuevamente, muchísimas gracias, besos y abrazos.

giovanni said...

Me gusta la pregunta ¿Por dónde empiezo?

Un abrazo

PD: Hace poco publiqué un post en mi página de facebook que lleva el título ‘Da dove comincio?’ / 'Par où dois-je commencer ?

MOLÍ DEL CANYER said...

Anda que no tiene imaginación la señora...a pesar del olvido eso se ha de reconocer. Muy bueno, besos.

El Demiurgo de Hurlingham said...

Jajaja.
Está claro que ella tiene imaginación. Y es cinéfila.
Algo mejor que la opción de que haya sucedido realmente. En ese caso, el esposo se tendría que preocuparse por amistades no muy recomendables. Y el estar casado con una mujer, propensa a meterse en problemas.

Pero sospecho que ella lo sigue queriendo. Tanto para inventar un pretexto.

Muy bien contado. Un abrazo.

Colotordoc said...

Está, seguro es paciente mío... ellos se elaboran excusas muy "buenas", para no cumplir los tratamiento

Fuera de bromas, muy bueno.

Besote guapa

Charly said...

Como excusa desde luego está muy elaborada. El final del texto sorprendente.
Un placer leerte
Beso

Carlos Augusto Pereyra Martínez said...

Vaya si estas convocatorias acercan a los blogueros, y los ejercitan en pensamiento y escritura. Un abrazo. carlos

Gabiliante said...

Pues yo me lo he creido. No sé porque el marido es tan desconfiado. Yo, de ella, lo mandaba a tomar viento , y me iba con Jean, el negrazo, cuando salga de la carcel. Por desconfiado.
Besoss Myr

Gabiliante said...

Bueno, el negrazo no. El negrro, que el tamaño no importa
Mas besoss

Tracy said...


Aquí desde luego eso era tan raro que nadie se lo creía..
¡Pobre !!!