Lugar y época en que se desarrolla la novela "El lector de Julio Verne".
Introducción:
España, Andalucía, Trienio del terror
años 1947 a 49 inclusive. Nino es la voz narradora y cuenta la historia en
retrospectiva, treinta años después.
Ya desde el título del libro sabemos a lo que nos
vamos a enfrentar en la lectura:
“Episodios de una guerra interminable” de los cuales, según el plan de
la autora, este libro es el segundo de los 6 episodios que abarca. El personaje de Nino está basado en uno real: Cristino
Perez Meléndez, catedrático de Psicología por la Univ. de Granada, que la
autora conoció en Marruecos y que le relató su vida. Nino, el lector de Julio Verne, es un niño que crece en medio del terror y
por ello madura más rápido; un niño que aprende a moverse en el monte, contacta
con gente que ha llegado nueva a la zona
como Pepe el Portugués, con quien traba amistad y elije como modelo; un
niño que por una apertura a la cultura a
través de la lectura y aprendizaje escolar libre, bajo la guía de su maestra represaliada, es capaz de escribir un guión diferente para
su propia vida del que tuviera asignado por
su condición familiar de hijo de un guardia civil. Un relato que nos muestra la increíble capacidad del ser humano para superar circunstancias muy difíciles y
terriblemente dolorosas, trascendiéndolas, y construir una vida llena de significado
social y crecimiento personal. Una vida
ejemplar, que Almudena Grandes nos ha traído
a la luz con una prosa ágil y cargada de sentimiento, en su magnífica
novela.
A- La familia de Nino:
La familia
vive en el pueblo Fuensanta de Martos en Andalucía, en el cuartel de la
guardia civil de paredes muy finas,
porosas como esponjas P31. La Familia está compuesta por el padre Antonino Perez nacido en Valdepeñas, Jaen P 34, que es guardia civil desde después de
estallar la guerra que había partido a España en dos mitades, en la que los padres de Nino estaban en una y sus familias
en la otra. El padre de Nino se alistó como voluntario para que no le
pasara nada a su mujer ni a su hija
pequeña (la primogénita Dulce), antes de nacer los otros hijos y fue a parar a una Compañía de la Guardia Civil P35. Antonino,
el padre, sabía leer y escribir, pero apenas había podido asistir a la escuela y
mostraba un respeto reverencial por cualquier clase de conocimiento que solo
pudiera adquirise en los libros... P143.
La madre Mercedes Ruiz nacida en el clima caliente de Almería, pasa muy mal en los inviernos,
hasta el punto de dormir vestida P 31. Tiene tres hijos y hacia el final del
libro, en 1949, la madre espera un
cuarto hijo. La hermana mayor se llama Dulce, luego viene Nino, el del medio que en
1947 tiene 9 años, con cumpleaños los 14 de enero. Nino había nacido en plena
guerra en el pueblo de Valderrubio, de Granada, donde habían vivido dos años y habían sido
muy felices. Su padre que había ido a luchar, conoció
a su hijo con más de un año. La
tercera hija, hasta ahora la más pequeña, se llamaba Pepa, 5 años menor que Nino.
Relación de los padres entre sí:
Entre los cónyuges hay una buena relación como
pareja, incluso tienen relaciones sexuales, a pesar de lo hacinados que vivían
en el cuartel P31 o de lo cansado que él llega del trabajo. Conversan, pero cuando la mujer se pone pesada
con el “mira Antonino...” él pone punto final a una discusión
con un: “No me digas nada,
Mercedes. Tú hazme caso y no me des
consejos” y ella cierra entonces con un “ea, pues lo
que tú digas” P32, P49, P122, P177, P281.
Mercedes obedece al marido como una buena mujer de
la época, pero también tiene su propio criterio, ésto lo vemos, por ejemplo, cuando
discute con el marido sobre lo de las mujeres embarazadas del pueblo por los
maridos que habían subido al monte. Antonino dice que la mujer de Cencerro está
presa por hacer propaganda subversiva y Mercedes le discute, que como va a ser propaganda subversiva acostarse con su
marido y meterle los cuernos esté bien y se lo discute a fondo, no callándose “porque no me da la
gana, ea.” P92.
Las angustias y otros malestares de la madre: quejándose siempre por
el frio de invierno ej P35, como un rumor constante P40 y sobretodo
por la situación de violencia
(maquis de izquierda que hacían atentados;
requetés, falangistas de derecha) y las represalias de la guardia civil
en contra de la población civil: lo
resume la preocupación de ella cada vez
que al marido le tocaba subir al monte a dar una batida: “Yo ya no puedo más,
una noche de estas me voy a morir de angustia, ésto no puede seguir así, Antonino” P60 o “Esto no se va a
acabar nunca, Antonino ¿me oyes?, nunca.... Por cada uno que matáis se van para arriba
siete, y cuando matéis a esos siete, habrá en el monte catorce...P64- 65 o cuando repetía después de una noche en que
se habían torturado a los detenidos “No se puede vivir así Antonino, así no se
puede vivir porque mañana es fiesta pero pasado habrá que ir a la compra y me
tocará hacer cola con las mujeres, con las madres, con las hermanas de esos a
los que acabáis de romper todos los
huesos y no tendrá valor para mirarlas a la cara ¿me oyes?....” P81. Igualmente, en P154,
P155, P244
Los miedos y otros sentimientos del padre: Antonino no quería que
lo destinaran a su pueblo P35. Hubiera dado lo que fuera porque no, o por cambiar de destino P106, pero, le tocó
allí y eso le costaba mucho, incluso llegó a llorar luego de regresar de una
noche de redada y tortura en el cuartel P82.
Hay veces incluso que desobedecía
las órdenes de su jefe, como la vez que le habían asignado a él y a su compañero Romero un servicio de
cuatro días y noches muy peligroso fuera de casa recorriendo cortijos y Nino lo
encontró escondido en su dormitorio P71. También lo escuchó agotado de cansancio en
cualquier estación del año, maldecir ese
“destino
de mierda”, “sueldo de mierda”, vida de mierda” P60. Luego de las noches de redada cuando la esposa
le preguntaba si había quedado contento, Antonino agachaba la cabeza P104. Aunque en el cuartel, los unos a los otros se
justificaban para no sentir remordimientos P 104, Antonino consideraba a Sanchis, el sargento, como un fanático, loco descontrolado y
peligroso P112. Antonino mostraba en sus
ojos pesadumbre, mezclada con tristeza, rabia, vergüenza. P73 incluso llegó a
llorar, como dije antes, P82, ”por
quedarse quieto, callado, sin hacer
nada” y ver
como sus compañeros torturaban a la gente del pueblo y según sus propias
palabras se sentía “como la mierda de hombre
que soy”....P82
El padre -junto con Romero- desobedece también la orden de Michelin, el jefe, la vez que Nino los va a buscar al
monte, porque no quiere dejar viuda a su mujer y ni huérfanos a sus hijos,
cuando los maquis ahora que lo único que quieren es marcharse P371.
Contribución
a la lectura colectiva virtual que hacemos bajo la conducción de Pedro Ojeda
desde su blog La Acequia. © Myriam Goldenberg.
Nota: citas textuales de la autora en
letra azul del Libro “El lector de Julio Verne” por Almudena Grandes, Tuquets
Editores, Barcelona, Marzo 2012.
16 comments:
Interesante, como son también las novelas de Almudena.
Besos.
Buen resumen, Myriam pero vas muy lanzada, yo aún voy por la página 245... Besotes, M.
Yaa!! Uff! Tuve que dejar el libro a medio leer durante el mes de agosto por trabajo. Tengo que ponerme al día Myriam, y septiembre no me lo está poniendo fácil. En fin, con este libro se disfruta de una lectura fácil y amena. Así era la España profunda de entonces.
Me encanta tu exposición.
Un abrazo enorme
Hola Myriam, me parece un tema muy interesante, yo no llegué a conocer la guerra civil de España, pero mi madre me contó mucho como para hacer un libro.
Me encantan cómo se trata a los personajes y refleja muy bien la conciencia de ser hermanos y tener que llegar a matarlos.
Intentaré seguir el resto.
Gracias
Con ternura
Sor.Cecilia
Buen trabajo y buena lectura.
Esperemos al profe.
Me alegra volver a leerte después de las vacaciones de verano. Un fuerte abrazo y como siempre gracias por tu blog.
Ilustrativo, me gusta aprender a través de tus palabras.
Un abrazote
Muy interesante y enriquecedor, me anoto el libro para leerlo cuando pueda.
Un abrazo :)
Excelente trabajo, un resumen cabal y muy interesante amiga, me dio ganas de correr a buscar el libro ya que me enterneció mucho,... los niños son tan maravillosos su inocencia es su fortaleza y a la ves su escudo para afrontar realidades tan adversas,....me gusto mucho te seguiré leyendo siempre amiga...
Yo viví la Andalucía de los 50 donde todavía se le tenía un miedo atroz a la guardia civil u sus torturas...
Buen relato de aquella realidad detestable.
Besoss
Un concepto muy particular de madurez infantil. Que a su vez sirve para cuestionar la interpretación presente al respecto.
Por lo demás sigo atento a la reseña.
Un abrazo Myr!!!
Sobre mis aportes al club de lectura quiero aclarar que:
Conforme a la consigna del Profesor Pedro Ojeda en el margen superior derecho de La Acequia de que comenzamos la lectura en Septiembre -siendo que estamos en este mes y que mi trabajo es extenso (10 u 11 folios)- lo he tenido que seccionar aquí en mi blog en 8 entradas a publicar cada miércoles y jueves del mes, facilitando así su lectura a quien desee hacerlo cuando lo considere oportuno.
A Todos Gracias por estar aquí y abrazos a cada uno de Uds.
Gracias por tu valiosa colaboración.
Tu aportación -leídas ya las seis entradas que has publicado- es tan excepcional como siempre.
Aqui das las claves iniciales fundamentales: la visión del niño en la narración -que condiciona todo- y esa relación entre los padres y entre ellos y la naturaleza. Invernal, fría, distinta a la que nos podríamos esperar.
Excelente, Myriam. Un beso.
Una excelente introducción a la novela, Myr.
Desgajas aquí, los puntos de análisis.
Besos.
Post a Comment