Monday, June 21, 2021

Andrée de Jongh, nombre clave "Dedé", heroina de la resitencia belga durante la Segunda Guerra Mundial y el Tercer Reich

Andrée de Jongh, nombre clave Dedé,  (Schaerbeek, Bélgica, 30 de noviembre de 1916 - Bruselas, 13 de octubre de 2007) fue una enfermera, integrante de la resistencia belga, que organizó y lideró  la Línea Cometa (Le Réseau Comète), para la fuga de soldados aliados durante la II Guerra Mundial.
 

Cuando los nazis invadieron Bélgica en mayo de 1940, Andrée de 24 años,  se instaló en Bruselas, donde con ayuda de su padre pasó un año preparando una red para la fuga de soldados aliados capturados que pasó a dirigir. En agosto de 1941, se presentó en el consulado británico en Bilbao junto con un soldado británico y dos voluntarios belgas, con quienes viajó en tren, pasando por París hasta Bayona y luego cruzando a pie los Pirineos. Obtuvo el apoyo del MI9 y por rutas similares, llegando luego al consulado británico en Madrid y desde allí a Gibraltar. 400 militares aliados escaparon desde Bélgica, de los cuales Andrée acompañó durante todo el viaje a 118.

La Gestapo capturó a su padre, Frédéric de Jongh, en París, en junio de 1943 y lo ejecutó. Otros integrantes de la red que fueron traicionados y  detenidos, 23 de los cuales también fueron ejecutados. Andrée fue a su vez capturada y torturada  en enero de 1944, pero la Línea Cometa siguió funcionando y logró, en total, la evasión de más de 400 prisioneros, asumiendo, como se ha dicho todo tipo de riesgos.

Los nazis, sin sospechar -por su apariencia delicada, femenina y juvenil- que era Andrée la jefe de la red, después de mantenerla en la prisión de Fresnes, la enviaron al campo de concentración de Ravensbrück. Fue liberada por las tropas soviéticas el 30 de abril de 1945.

Después de la guerra trabajó como enfermera en el Congo Belga y luego en Etiopía, en el hospital para enfermos de lepra de Adís Abeba. Jubilada, vivió sus últimos años en Bruselas. Cuando su madre agonizaba en Bélgica y Andrée se  encontraba en Etiopía la RAF, la Royal Air Force, en señal de  agradecido recoocimiento, la fue a buscar a Etiopía y la llevó a Bélgica a  ver a su madre y la regresó luego a Etiopía.  

Andrée  de Jongh recibió diversas condecoraciones como Medal of Freedom de Estados Unidos, y la George Medal en el Reino Unido; además en Bélgica recibió el título de condesa y el grado de teniente coronel del ejército.

 

 

Rutas de escape de  aviadores aliados caídos  y otros:   Linea Pat  (en azul), Línea cometa  ( en rojo)  y línea  Shelburne  (en marrón).

A la línea Pat O'Leary  la línea Cometa,  y la Shelburne  y otras menos importantes, se les atribuye haber ayudado a más de 5,000 aviadores y soldados aliados, aproximadamente la mitad británicos y la mitad estadounidenses, a escapar de la Europa occidental ocupada por los nazis durante la Guerra Mundial . II. Aproximadamente 12.000 personas, casi todos civiles y casi la mitad mujeres, participaron en el trabajo de las líneas de escape. Aproximadamente 500 de ellos fueron capturados y ejecutados o murieron en campos de concentración. Muchos más fueron encarcelados por los alemanes


  1. Neave, Airey (1970), The Escape Room, New York: Doubleday, pp. xiii, 121
  2.  
  3. Ottis, Sherrie Green (2001). Silent Heroes. Lexington: University Press of Kentucky. p. 22. ISBN 0813121868.


  Más sobre Andrée de Jongh,  aquí 

 

 

13 comments:

Campirela_ said...

Muy buenos días, que buen reportaje nos dejas y cuantos datos eso es importante saberlo ademas super interesante el papel de la mujer en esa huida de salvar muchas vidas. Gracias por traernos estas informaciones. Besos y abrazos y cuídese mucho.

Genín said...

Estupenda historia, es una de esas que te deja con ganas de hacer cosas por los demás... :)
Besos y salud

Alfred said...

Es bueno reconocer el mérito de estas heroínas y divulgarlo. Gracias.

Un abrazo.

Cayetano said...

Una mujer dura y valiente. Y tras la guerra más acciones a favor de los más necesitados. Todo un ejemplo.
Un abrazo, Myriam.

Ester said...

Cuantas vidas, cuantas historias de esas que nos devuelven la fe en las personas. Has traído un reportaje excelente. Un abrazo

Esther said...

Una mujer extraordinaria, no la conocía, muchas gracias por el reportaje. Besos

Recomenzar said...

Maravillosa entrada llena de estupor

Albada Dos said...

Hay historias que parecen mentira. Pero es que la realidad supiera siempre a la ficción.

Gracias por compartir. Un abrazo

manouche said...

Je m'associe de tout cœur au devoir de mémoire.

Colotordoc said...

Conocía a Andreé. Estas historias nunca dejan de sorprender...

Besote

Rita Turza said...

Maravillosa entrada y maravillosa mujer.
Siempre es un gran placer leerte mi querida Myriam.

Un fuerte abrazo.

Javier Rodríguez Albuquerque said...

En el programa EL INTERMEDIO, en La Sexta, a menudo hacer reportajes sobre mujeres que con su fuerza y determinación han conseguido abrir brecha en muchos campos. MUJER TENÍA QUE SER, se titula.
Me recuerdas mucho a ese programa. La diferencia es que ahí hablan de mujeres actuales o de hace pocas décadas.
Musu bat.

Neogeminis Mónica Frau said...

Una vida heroica consagrada a los demás. Digna de ser recordada. Todo un ejemplo de lucha y entrega. Conmovedor.
Un abrazo Myriam. Que sigas bien!