Saturday, June 30, 2012

El constructor invisible


Todas las mañanas cuando Marcos se levantaba, abría la ventana para dejar filtrar los rayos del sol, luego salía con su bandeja de desayuno a la terraza de su casita mediterránea y leía el diario, escuchando los violines de Mendelssohn o los violoncellos de Brahms. Mirar el mar a lo lejos, le encantaba. Había quedado viudo hacía cuatro años ya. Sí, su matrimonio había durado casi medio siglo,  hasta   que su  dulce amada lo había abandonado después de una larga y penosa enfermedad.

Ella había sido su compañera de aventuras, su apoyo en los días más turbios. Cuando las fuerzas flaqueaban, cuando sentía que todo era muy difícil, ahí estaba Andrea para darle aliento. ¡Cómo añoraba las largas conversaciones que tenían, las caminatas, los viajes,  sentirla en la cama junto a él, todo!.

Perder a su querida compañera, fue la prueba más dura que Marcos tuvo que sobrellevar. Para poder seguir con su vida, decidió que era hora de dedicarse a su afición preferida, que a la vez, le servía de terapia. Construía modelos de ciudades, de pueblos, por los que había paseado con Andrea, o de lugares imaginarios, que hubiera querido recorrer con ella...Serruchaba las maderas, las pegaba en una maqueta, armaba puentecitos y así pasaban las horas..... las eternas e incontables horas......

Todas las noches, al acostarse, daba gracias a Dios, porque sabía que había sido bendecido con una compañera así. Sin embargo, ahora estaba solo. Nada podía llenar ese vacío que sentía y muy en el fondo, deseaba que llegara el día en que pudiera reunirse con su Andrea.

Pasó otro día _ tengo que concentrarme en la maqueta_ se dijo_ No voy a caer en una depresión. No, no lo haré. Andrea hubiera querido que yo estuviera bien. Pero no pudo con la pena... y en un arranque de rabia y dolor,  la destruyó. Los pedazos volaron por toda la habitación. Agotado, extenuado y dolorido, se fue a dormir. Las lágrimas corrían por sus mejillas. Entre sollozos, se dejó vencer por el sueño.

La noche era fresca. El aire puro del mar, que le hacía tanto bien, inundaba su cuarto. Y soñó...... Soñó que con Andrea recorría las islas Griegas en su velero, como tantas veces lo había hecho. Llegaron a una isla y atracaron. Bajaron a tierra y decidieron que irían a caminar por el bosque. De todas formas, no había viento. Todo estaba calmo, sereno,  y el día, encantador.

Pero ¡oh sorpresa!, cuando regresaron, el barco había encallado en los arrecifes. Su proa estaba toda destruida.... _ ¿Qué haremos? _ se preguntaron angustiados..... Justo en ese momento apareció un hombre alto de cabellos canosos, con una extraña vestidura refulgente. _ No teman, he venido a ayudarlos_ dijo, con voz profunda y subió  de inmediato a una barca. El hombre remolcó la embarcación hasta la costa. Luego, no se sabe de dónde, sacó maderos, metales, aparatos y pintura y se puso a reconstruir el casco herido. Trabajó todo el día hasta caer la noche. Entonces volvió a hablar _ Mañana podrán partir, ahora es mejor que vayan a la posada del pueblo a comer algo y a dormir. _ Gracias..... mil gracias ...... pero....¿cuánto le debemos? _ Preguntó Marcos...._ ¿Cuál es su nombre? _ inquirió Andrea y miró,  el hombre  había desaparecido sin decir nada.

Agitado, Marcos volteó en la cama y despertó todo sudado. Buscó a su amada, quería volver al velero para irse de la isla.... pero triste, se dio cuenta de que había soñado todo eso. Ella, ya no estaba....
Un aroma a flores invadió la habitación.... Los jazmines eran las flores favoritas de ella, sí, era el aroma de jazmines y no estaba soñando. Al pasar por la sala, vio su maqueta..... Para su sorpresa estaba entera, completa, terminada. Miró con atención todos los detalles... Ahí estaba la isla que había recorrido en su sueño. Ahí estaba el pueblo que había visitado con Andrea, los arrecifes, el mar, todo estaba allí.

Una paz infinita invadió su corazón..... salió a su terraza.... y se sentó..... El aroma de los jazmines, se hizo aún más penetrante y una brisa comenzó a soplar......Es_ se dijo_ tiempo de partir_ y cerró sus ojos para siempre.


30 comments:

Natàlia Tàrraco said...

Andrea y Marcos, una vida compartida de amor auténtico, y la soledad produce sueños en la razón, bellas ensoñaciones el día antes de partir sosegado a la travesís eterna con Andrea.
Las maquetas, esas miniaturas posible de las cosas, nos hacen meternos dentro, y si las rompemos nos rompemos a cachitos. Esa de Marcos era tan real, tan valiosa que él mismo la reconstruyó convertido en mago.

Myriam, otro de tus delicados e intesísimos relatos, amor a la vida, al viaje que representa, y sueños y compañías. Hermoso.
Gracias por tu mensaje siempre cariñoso, besitos casi marineros.

U-topia said...

Qué preciosidad de relato. Esos amores eternos son envidiables.

Muy hermoso.

Besos!!

Bertha said...

Que final más dulce dentro de la agitación del sueño.Ya quisiera este final para mí como entrar en otro sueño y eterno ademas.

Un abrazo feliz finde Myr.

Migue said...

Me encantó tu relato Myrian,nos fuiste llevando hasta el desenlace.En estos tiempos de relaciones frágiles,que se unen,rompen y vuelven a probar con otra.Marcos y Andrea se amaron,acompañándose en los buenos y malos momentos.Él deseaba el reencuentro y como en un sueño partió junto a ella.Se da en la vida...

Un abrazo enorme.
Desde Flexibilidad es adaptación.

Unknown said...

Se me ocurre lo duro que debe ser despertarse y no encontrar a esa persona con la cual ha compartido casi la vida. Cuando se pierde a un ser que has querido mucho, es así por unos años: sueñas, parece mentira, ¿habrá sucedido o no?

Abrazos y besos Abuporalgomás :)

mj said...

Lo que los sueños esconden!
Marcos no murió solo....

Hermoso relato Myriam
Feliz fin de semana, un beso.

Aristos Veyrud said...

Normalmente llegamos a este mundo, a esta dimensión desde el sueño o los sueños de nuestros padres, apenas tomamos consciencia son los sueños la proa de nuestro destino, justo es que cuando abandonemos esta forma de ser, cuando ocurra la siguiente transformación lo hagamos también en un sueño y si es preparado con antelación con maqueta y todo mucho mejor ja ja ja.
Este escrito es un ejemplo cómo a través del arte podemos redimirnos con nuestro propio humanismo, esencia abandonada por tanta pesadilla y lo que es peor por pesadillas que no son nuestras sino de otros y que tontamente decidimos seguir y vivir.
El arte nos ayuda y nos conmina a que nuestra vida sea un sueño real y no un espejismo.
Un abrazo Myr!!!

Montserrat Sala said...

Hola Myriam: Un hermoso relato. Rezuma delicadeza por los cuatro costados.
Un viaje largo por un corto sendero...

Gracias por compartir. Que tengas un feliz finde

María Pilar said...

El viaje como metáfora de la vida y la paz y tranquilidad que se alcanza cuando se llega al destino y con ello el encuentro con los seres queridos que partieron antes.

Besos :)

Asun said...

Marcos pudo construir en su sueño el lugar idóneo en el que encontrarse con Andrea, y su sueño se hizo realidad. Todo estaba pues preparado ya para que se reencontraran. ¿Para qué esperar más?

Un relato muy tierno y emotivo donde se ve la fuerza del amor.

Un beso muy grande, Myr.

PENELOPE-GELU said...

Buenas tardes, Myr:

Muy bonito relato.
Los vecinos y paseantes de la playa, cuentan que de la terraza de la casa -ahora deshabitada-, por la mañana, les llega música de violines.
Y dicen, que al acercarse, la brisa del mar deja paso al olor a jazmines.

Abrazos.

LOLI said...

Que muerte tan bonita...

Un besazo ♥

Belkis said...

La fuerza del amor que todo lo puede. Un relato muy emotivo Myr. Que gusto volver a leerte y ver que te superas cada día. Cómo andas?
Te envio mi cariño de siempre
Besos

Merche Pallarés said...

¡Precioso relato! Y con un final feliz lleno de sueños y jazmines... Muy bueno, Myriam. Besotes, M.

Bandada de Palabras said...

No podría imaginar mejor regalo al morir que la vida sorprendiéndonos por última vez con su magia.
Un saludo, Myriam.

Abejita de la Vega said...

Se lo llevó para siempre, a construir maquetas celestiales.

Besos, feliz verano.

Alas.Rotas said...

Otra aventura para recorrer la vida de Marcos, con tus letras nos haces participe de su vida y de sus hechos, según lees te vas metiendo en el entramado de su vida lo mismo que si lo viviéramos nosotros mismos. Magnifico..........

Paco Cuesta said...

Ternura en forma de escrito. Gracias Myriam

TORO SALVAJE said...

Ohhhhhhhh, una tragedia de amor como las de antes!!!

Muy, muy, muy emotivo.

Besos.

Anonymous said...

los sueños nos preceden,
o quizás son nuestro agujero negro, donde quedan para siempre...
pero sólo si son bellos.

un abrazo Myrian.

tienes un pequeño regalo en:
http://josebazare.blogspot.com.es/

matrioska_verde said...

una muerte pacífica y muy romántica... yo firmaría ahora mismo para morir así.

biquiños,

Pedro Ojeda Escudero said...

El gesto de abrir la ventana y aceptar el mundo al inicio del relato se cierra con la aceptación final.
En el fondo, la dignidad de la vida es esa, Myriam.
Besos.

Javier Rodríguez Albuquerque said...

Me has recordado el estribillo de aquella vieja canción de Joaquín Sabina que dice:

Y morirme contigo si te matas
y matarme contigo si te mueres
porque el amor cuando no muere mata
porque amores que matan nunca mueren.

Un beso.

Unknown said...

¿Quedan amores así?

Como dice Toro, eso era antes, creo.
Sólo conozco un matrimonio muy mayor que, (hace diez años), cuando murió el marido, ella entró en un depresión profunda y se fue a los seis meses después.

Pienso que antes la soledad les podía, no estaban preparados para vivirla, sobre todo los matrimonios sin hijos, sin embargo ahora, la vida nos enseña desde jóvenes y llegamos a la vejez con más seguridad e independencia y con eso no quiero decir que el amor no perdure hasta el final, eso es lo bonito.

lichazul said...

amor y devoción, casí una fusión entre dos

miedo da llegar a ello,sin disfrutar lo que reste


besitos

virgi said...

¡Si todos pudiéramos tener un final así!
De vez en cuando sueño con ciudades, es uno de mis sueños deseados y reconfortantes.
Besos, Myriam

Unknown said...

Ummm querida y dulce amiga como me gustan estos relatos hechos con retazos de nuestra vida, de nuestros deseos y de nuestra fantasia..

son preciososo y delicados.. y como tu este me ha resultado delicado.. suave... tierno.. emotivo..

con ese aroma y ese mar y ese corazón...

te agradezco tu amistad, tu cariño y tu compañia en este año que bueno se nos va a quí con el verano..

me voy de vacaciones y paso a dejarte un beso, un abrazo y un gracias por tu amistad

Buen verano, sino es con Marcos que sea placentero, con quien sea, pero placentero y de lujo a tope..

ahi es na...... vamos.. de tooooo

besosssssssssssssssssssssssssssssssss

Anonymous said...

Mye! que linda historia, si te cuento que llegando al final se me erizó la piel... y si fuera asi que uno se va, que viene quien más amas a buscarte... espero que sea asi.
Un beso

Miguel said...

Amor, vida y muerte. Una conjunción real.
Bonito y valiente relato.

Un beso.

María said...

Fíjate MYR,

no sé donde leí que cuando moría una santa, la habitación quedaba perfumada de olor a jazmín, supongo que para Mario, ese olor, el de su amada, fue la manera preciosa de que ella tuvo de venirle a buscar.
La muerte siempre se ve como algo terrible y yo siempre pienso que es la manera de volver a estar con los seres queridos que se fueron, como que de alguna manera, todo el mundo se vuelve a reunir. En este caso fue así y seguro que su amor vivirá con ellos eternamente... como a mi me gusta pensar que es el amor de verdad.

Preciosa tu historia MYR, cielo... me ha parecido una especie de mezcla de Pinocho (¿recuerdas cuando Gepetto se quedó dormido, vino el hada de la azul y dio vida a su muñeco de madera?) y una historia de amor.

Mmmmmm ... Vas a ver que sueños más bonitos tengo esta noche gracias a ti:))


Un beso muuuy grande bonita.


Tú no lo sabes, pero hoy, tengo que darte gracias dobles:-)


Muaaaaaaaaaaaaaakss y dulces sueños.