Friday, November 19, 2010

Hay dias que peinarme



se me dificulta un poquito,
entonces respiro profundo y me doy una voltereta por esos espantosos centros comerciales,  no a comprar  ¡no!.....¡obvio que no !
¡a culturizarme musicalmente!







La mezzosoprano que canta es: Vera Cirkovic

La foto de la medusa es mía; la producción, de artistas del Kibbutz Ein Gev.


Agregado : Los que  me conocen bien saben que soy anti-consumista.  A la hora de comprar algo que necesito, las marcas me importan un rábano, miro eso si la calidad. 
Algo que  es muy recomendable cuando se falsifican tantas marcas a bajo costo. 
Los grandes Centros Comerciales me dan generalmente dolor de cabeza, una razón más para evitarlos como a la peste.  Los  comentarios de Javier García Riobó y Paco Cuesta hasta el momento de adicionar estas líneas, me hacen reflexionar en un hecho en el que no pensamos mucho a la hora de hablar de Consumismo, y es que,  existen personas que consumen compulsivamente  no sólo por los efectos de la publicidad subliminal o intrusiva -muchas veces hasta límites violatorios de la integridad humana- sino también porque pretenden llenar de forma inconsciente,  un gran hueco de cariño que llevan en su interior, como si el comprar y poseer pudiera mitigar esa falta y el dolor que conlleva.

27 comments:

jg riobò said...

Buena alternativa al consumo voraz.

Paco Cuesta said...

Al final todos acabamos en un super centro. ¡Tienen tantas cosas!

Aristos Veyrud said...

Myr quéeee EDICION!!! fantástico. Si tienes información acerca del escultor de la obra de tu fotografía por favor me gustaría conocerla. Bueno y la ópera en el centro comercial, sin palabras!!! Genial Myr, genial.
Me gusta, me gusta cuando se muestra y se demuestra ese vínculo de lo humano con la riqueza infinita del universo, con la capacidad humana de lograr lo extraordinario. Estamos acostumbrados más a enfocar nuestra atención y nuestro lente sobre las miserias y carencias del espíritu muchas veces hasta con morbosidad y terminamos por acostumbrarnos a esas miserias, terminamos aceptándolas como naturales banalizando con ello el espíritu trivializandolo a la estrechez del consumo.
Excelente Myr espero no te sientas incómoda porque ya mismo publico el video en el Número 13 junto con tu dirección!!!
Esta es una de las ventajas de ser bloguero, es un mundo lleno de sorpresas, de grandes sorpresas.
Un abrazo Myr!!!

Merche Pallarés said...

La medusa necesita un buen peinado...je,je... Yo tambien odio los centros comerciales y odio hacer compras. Cuando necesito algo voy directamente al grano y si llevan la marca de fulanito o zutanito más grande que la prenda en cuestión, NO la compro.
Volveré con calma a ver el video. Besotes, M.

Abejita de la Vega said...

No me da ningún placer el comprar y mucho menos en un centro comercial. Poco femenina que es una...Nunca he pillado una buena actuación de opera como esa en mis escasas visitas a galerías comerciales.

Un beso, todos tenemos días malos, Myriam. Nos vemos.

Pedro Ojeda Escudero said...

Siempre se ha dicho que los beneficiarios de la insatisfacción son los grandes almacenes.
Y con qué poco podemos vivir...
Yo, cuando no puedo peinarme, recuerdo cómo mi madre me aplastaba el pelo rebelde con el peine lleno de agua.

María said...

Mi querida MYRIAM,

antes de nada, mis disculpas por mis ausencias que ya son tantas que no se si me pondrás una cruz en la frente, espero que no. Verás, has escuchado esa frase que dice "morir de éxito" verás sin querer parecerte una pretenciosa, porque ni yo me lo explico, a mi muchísimo trabajo en le despacho y resto de quehacer de la vida, se suma que contestar en mi blog ( que me encanta, por que sois todos unos verdaderos cielos:-) me lleva tantísimo tiempo, con lo que me enrollo que a penas puedo visitar otros, no sé si vale de disculpa pero es la verdad verdadera:-) eso no quiere que os olvide en absoluto.

Además quería pedirte perdón solemne, porque como otro de mis muchos defectos aquí, es que escribo lo primero que me surge, me despaché a gusto con tu pobre Segal jajaja espero que lo hayas visto como una muestra de confianza, porque lo que menos deseo en le mundo es molestarte, a nadie, pero a ti menos, en fin, me salió eso y ¡¡zaaas!! es una de las cosas por las que yo creo que me encanta esto aquí no hay que reprimir nada, o al menos, ese gusto me doy yo, pero en ocasiones como esta la releer, me he dicho ¡¡ay, Dios María cómo te has pasado!! en fin, no volverá a ocurrir te lo prometo. En ocasiones la confianza da asco y esta debe ser una de ellas.

De tu entrada te diré, aunque ya sabes, que este tema justamente lo toqué también en mi anterior entrada, que efectivamente en esta sociedad tan desaraigada algunas personas pretende llenar sus vacíos afectivos consumiendo compulsivamente, llegando a ser semejante a la ludopatía al ser incapaces de frenar el impulso incontrolable de compra y consumo.

La publicidad a veces es tan tremenda que sin darnos cuenta va calando en le subconsciente de forma subliminal y a lagunas personas las enferma, creo que podría pensarse que es eso, sus ansiedades y carencias son resultas de esta forma, pero ¡¡qué te voy a contar a ti que no sepas, mi niña!! :-)

A mi, personalmente cada vez me gusta menos comprar, así ¿qué te parece si nos vamos juntas otro ratito a la ópera? :-) mira para compensar todos mis desastres contigo, te dejo una de mis favoritas, por cierto lo del centro comercial de vídeo una buenísima idea, yo lo había visto en un mercado y en una cafetería, llevar la ópera a la calle es una de las mejores cosas que se les ocurre a algunos, porque hay mundo fuera de las tiendas...


Venga ¿te vienes conmigo pues, MYRIAM?:-)


A VER SI TE GUSTA, ANNA NETREBKO A DEMÁS DE GUAPA ES DE LAS MEJORES SOPRANOS DEL MUNDO EN LA ACTUALIDAD:-)


Montón de besos y feliz finde, cielo

Janeth said...

Los centros comerciales, no me gustan, pero que buena idea de poner musica de calidad para que la oigan los visitantes, eso si me gusta, el video lo muestra y la cantante super me encanto,...realmente te sube la energia esta musica de primera,...

josef said...

A nadie nos gustan los centros comerciales pero al final todos acabamos metidos en ellos ¿por qué será?
Respuesta: Porque nos manejan igual que al ganado.
Excelente ópera por cierto.
Un beso.

Merche Pallarés said...

Acabo de ver el video ¡genial! Me ha emocionado, me han saltado las lágrimas. Creo que así me reconciliaré con los centros comerciales... Besotes, M.

Merche Pallarés said...

He venido a ver tu post sobre El Quijote (me sale en mi link) y ¡no lo veo! ¿Serán los encantadores que han entrado en tu blog??? Besotes, M.

Asun said...

Oooouuuuchhhhh!!!!!!
Se me ha quedado el peine enganchado y me he dado un tirón de mil pares de narices. Es que hoy llevo los pelos un poco a lo loco, jejejejeje.

A mí también, los centros comerciales cada vez me gustan menos. Totalmente de acuerdo contigo en que hay gente que intenta llenar su vacío afectivo llenándolo de cualquier adicción: compras, comida, droga, sexo, alcohol, trabajo... La lista sería interminable.

Bueno, voy a ver si me peino que voy a ir a culturizarme un poco. NOOOO... a un centro comercial no... Al teatro!!.

Besotes

Prunus said...

...y no encuentro nada mas que añadir a este video ...

http://www.youtube.com/watch?v=23nnJij_yc4

Antonio said...

A mí me agobian los centros comerciales y cuando voy de compras me sale urticaria, psicológicamente hablando. Creo que la pretensión última es el úsese y tírese… cambiar la expresión “con su mismo” lo que fuere, por consumismo, de consumir.
Un abrazo

Manuel de la Rosa -tuccitano- said...

como dice un comentario anterior, al final acabamos allí... es curioso querida amiga, que todo el mundo critica el consumismo, pero al final no conozco a nadie que no lo sea....al menos de obra... porque de palabra estamos todos bien apañados... besos

virgi said...

¡No veas lo que me cuesta a mí ir de compras!
La cabeza me parece muy buena, me recuerda a Pablo Gargallo. En cuanto a la música, debe ser una moda, porque me han llegado ya varios montajes similares.
Un abrazo

María said...

El consumismo nos invade, productos que anuncian en los medios de comunicación, publicidad hasta en la calle, dificil es que no nos dejemos influenciar.

Un beso.

Juan Antonio said...

Myriam, no me gustan los centros comerciales y evito comprar cosas superfluas, a pesar del continuo bombardeo de la publicidad en los medios.
Deseo que pases un feliz fin de semana lleno de armonía, paz, amor y felicidad.
Un abrazo.
Juan Antonio

Unknown said...

Myr me vuelven loca los shopping...solo una vez he ingresado en Córdoba capital.
Las chicas que ofrecen perfume, antes que digas nada 'lluvia' ahhh no soporto esos lugares atestados de gentes...ahora los súper se han convertido en algo parecido.

Solo compro lo necesario para vivir, cuando me ha sobrado dinero lo invertía en otras cosas.

Besitos de domingo :)

Catalina Zentner Levin said...

La ópera en Alto Palermo fue una réplica de lo que se está haciendo en otras capitales, me llegaron videos desde París, Londres y Tel Aviv.
Creo que es una iniciativa para acercar la lírica al público, por lo tanto resulta innovadora y positiva.

En cuanto al consumismo, estamos plenamente de acuerdo, sobre todo por su incidencia en los adolescentes.

Abrazos,

Fernando López said...

Dicen que la gente compra más cuando está deprimida. No sé si por falta de cariño, pero es un hecho.

Quizás es que no lo hayan vendido así.

Un abrazo

pancho said...

Está visto que los blogueros prefieren pasarse la neura tecleando y leyendo blogs que yendo a centros comerciales. Menos mal que hay pocos, de otra forma tendrían que cerrar el éxodo de las ciudades los fines de semana rumbo a las afueras donde se asientan los Shopping Centres, la invasión americana de filas de coches que se dirigen a los templos del consumo, abandonando los centros de las ciudades. Al menos en este país es una pena la adhesión total al American Way of life. Rendición sin condiciones.

Enredado en los pelos aparece DQ con su locura a cuestas, sus ansias de libertad.

Un abrazo.

Montserrat Sala said...

De momento, comento la entrada, después escucharé la ópera que por ser una de mis debilidades, necesito mucho sosiego y concentración.

Los centros comerciales,me dan auténtico pavor. Primera por las aglomeraciones que no soporto, segundo por contemplar como la gente dilapida su dinero de forma convulsiva, tirando de tarjeta y luego están los altavoces y el ruido que me producen dolor de cabeza

He de decir no obstante, que hubo épocas en mi vida cuando los hijos eran pequeños y yó no diponia de tiempo para comprarles ropa o calzado, iba allí un dia a la hora de comer, me llevaba un cargamento, a la noche probávamos todos las prendas i al dia siguiente a devolver i a pagar.
Saludos.

Montserrat Sala said...

Mágnífica voz. Y muy buena la escultura de los artistas del Kibbutz Ein Gev Gracias por compartir.

Elsa said...

Qué bonita la escultura y qué maravillosa voz.
A mí tampoco me gustan los centros comerciales, me marean y trato de evitarlos.

Besos, Myr.
Elsa

MIMOSA said...

El vídeo es genial, no se si es una forma más de promocionar que está utilizando este centro comercial en concreto, o es una iniciativa por la música. Yo no soporto los centros comerciales, no me gusta ir de compras, soy de las que llevan lo justo y necesario (je,je,je, me viene a la cabeza ciertas palabras de mi madre) y las realizan en los comercios al aire libre, los de pie de calle, pero no dejo de reconocer que esta iniciativa es muy bonita, sean los motivos que sean la que los iniciaron, llevar la cultura siempre es bueno de reconocer. Me encanta la ópera y gracias que aquí, tenemos todos los años un amplio abanico de cultura donde elegir. (Creo que me he liado un poquito,...me voy a peinar el lío)
Un abrazo

Belkis said...

Una original forma de culturizarte Myr. Yo también tengo fobia a ir de compras. Sólo lo hago por necesidad y voy sólo al sitio que necesito.
Cuando a mi se me hace difícil peinarme, sencillamente no lo hago y dejo mi melena leonina al aire.
Te dejo un beso amiga.
Como estoy tan retrasada leyéndote voy saltando los temas que tienen partes anteriores hasta ponerme al día. Poquito a poco cariño.
Estoy ejercitando mucho mi paciencia.
Besitos