Wednesday, February 28, 2018

¡Adiós a una mujer excepcional!: Muere Asma Jahangir, defensora de los derechos humanos en Pakistán, La abogada luchó por las libertades y la sociedad civil laica a pesar de detenciones y amenazas de muerte. Artículo por Ángeles Espinosa

No quiero dejar de rendir homenaje en mi blog a esta mujer excepcional.


Asma Jilani Jahangir, destacada abogada y activista de los derechos humanos paquistaní, murió el pasado domingo, en su Lahore natal, de un ataque al corazón. Tenía 66 años y había dedicado su vida a la defensa de las libertades, los derechos de las mujeres y el avance de la democracia. Acababa de concluir su mandato como relatora especial de la ONU para los derechos humanos en Irán (2016-2018) y con anterioridad había sido relatora para la libertad de religión (2004-2010) y las ejecuciones extrajudiciales (1998-2004). Su trabajo hizo que fuera propuesta para el Premio Nobel de la Paz en 2005, pero también le acarreó detenciones y amenazas de muerte en su país.

Fue encarcelada en 1983 por participar en el Movimiento para Restaurar la Democracia durante la dictadura del general Zia ul Haq. En 2007, otro militar, el general Pervez Musharraf, la colocó bajo arresto domiciliario a raíz de su implicación en la protesta de los abogados que terminó contribuyendo a que dimitiera. Su crítica al abuso de las leyes de blasfemia (que castigan con la pena de muerte el insulto a Mahoma) y de otras leyes discriminatorias, la hicieron especialmente vulnerable ante los islamistas violentos, mientras las autoridades se sentían incómodas con su defensa de las familias de “desaparecidos”. Hace cinco años, unos documentos filtrados sugerían que los servicios secretos paquistaníes habían planeado asesinarla.

Ni la cárcel ni las amenazas de muerte arredraron nunca a Asma Jilani. Su figura menuda escondía una voluntad y una determinación de hierro. Hija de un funcionario de buena familia, vio como su padre renunciaba a los privilegios de un empleo público, se unía a la oposición al Gobierno militar del general Ayub Khan y era detenido por sus actividades. En 1969, con apenas 17 años, la que luego adoptaría el apellido Jahangir por matrimonio, empezó su propia lucha por la democracia contra el dictador poniéndose al frente de una manifestación de mujeres. Su activismo le valió ser expulsada temporalmente de la universidad.

Estudió Derecho, algo inusual para una mujer en el Pakistán de los años setenta del siglo pasado, y en 1980 fundó, junto a su hermana Hina Jilani y dos amigas, el primar centro de asistencia legal gratuita del país. También fue el primer despacho formado sólo por mujeres. Dos años más tarde, ambas hermanas se convertían en abogadas del Tribunal Supremo, cuyo colegio profesional llegó a presidir.

Su paso por la cárcel en 1983 le puso en contacto con numerosas mujeres víctimas de las nuevas leyes dictadas por Zia para congraciarse con los islamistas, las conocidas como Ordenanzas Hudud. Al salir, se ocupó de esos casos y en 1986 contribuyó a fundar la Comisión de Derechos Humanos de Pakistán, comprometida con la defensa no sólo de las mujeres , sino también de las minorías religiosas, en especial ahmadis y cristianos, los principales perjudicados por aquellas normas.

Además, Jahangir investigó las acusaciones de ejecuciones extrajudiciales por parte de las fuerzas de seguridad, estableció un refugio para mujeres jóvenes e hizo campaña contra el trabajo infantil. Esa dedicación le granjeó numerosos reconocimientos internacionales, incluido el Premio Unesco-Bilbao para la Promoción de los Derechos Humanos, que en 2010 la llevó hasta la capital vizcaína.

Tras su muerte, tanto los políticos como los abogados que le han rendido tributo han destacado su valentía. A un nivel más personal, lo que me llamó la atención cuando la conocí en casa del periodista Ahmed Rashid en 2001, fue su humildad y su sentido del humor. Le sobreviven su marido, el empresario Tahir Jahangir, un hijo y dos hijas.


 Artículo  por Ángeles Espinosa
publicado en El País, Febrero 13 de 2017  

 

17 comments:

Javier Rodríguez Albuquerque said...

Estupendo el seguir dando luz a tanta valiente mujer.
Musu handi bat.

manouche said...

Une vie admirable, hélas trop courte. RIP

Pitt Tristán said...

Me uno a tu homenaje.

Saludos.

Ester said...

Benazir Bhutto, Nasima Jan, Malala Yusafzai... mujeres que luchan en un mundo adverso, me uno a tu homenaje a Asma Jilani. Un abrazo

Cayetano said...

Bonito homenaje el que haces a una mujer valiente y excepcional.
Un abrazo, Myriam.

Ele Bergón said...

A vece las lucha de las mujeres está llena de dificultades, pero algunas como Asma Jileni, siguen en su empeño y llegan hasta su final, no sin antes haber dejado su semilla plantada.

Es bueno recordarlo.

Besos

Genín said...

Que en paz descanse.
Besos y salud

Rafa Hernández said...

Todos los homenajes que se rindan a estas grandes personas son pocos; muy bien por este tuyo.

Besos.

Pedro Luso de Carvalho said...

Olá, Myrian!
Quando se perde uma mulher como Asma Jahangir em seu lugar ficam lembranças agradáveis de sua imensa coragem e solidariedade. Também sentimos que poderá ter seus seguidores, mas ficará um vazio, que será atenuado quando a bandeira que ela levava será tomada por alguém, que seguira o seu exemplo.
Beijo.
Pedro

Colotordoc said...

Conocía su trayectoria...Una triste perdida.

Besote guapa

Chelo said...

Cuántas mujeres excepcionales hay que muchas veces desconocemos.
Gracias por este homenaje, Myriam.
Un beso

Ambar said...

Merecido homenaje al que me uno. Fue una mujer muy valiente.
BesosMyriam

Abejita de la Vega said...

Que la tierra le sea leve a esta valiente mujer.

Recomenzar said...

Gracias por compartirlo Yo no sabía nada

Paco Cuesta said...

Otra más de las muchas mujeres que engrandecen el mundo. Merecido homenaje.
Besos

Rafael Humberto Lizarazo Goyeneche said...

Le haces un estupendo y merecido homenaje, fue una mujer guerrera hasta el fin.

Un abrazo.

Pedro Ojeda Escudero said...

Gracias, de nuevo, por contribuir al conocimiento público de tantas mujeres que dieron tanto en su vida. Que la tierra le sea leve.
Besos.