Monday, January 30, 2017

Los paracaidistas



Estaban volando en un avión comercial pequeño un cura con sotana, un cantante hippy, un  economista encorbatado y un político de mofletes rozagantes.   Charla va, charla viene, todo era ameno, whisky, vino, pan, queso y jamón ibérico;  hasta al cantante le dio por  tocar  la guitarra y deleitar a los otros pasajeros con la última canción de ese que ganó el Nobel de literatura, hace poco. 

 De pronto el avión se sacude, cae en picada, se ajustan los cinturones,   vuelan los pájaros, digo, caen las máscaras de oxígeno. Suena el altavoz:  "señores pasajeros tenemos un leve inconveniente, el motor de la izquierda de ha parado, pero no se preocupen, todavía funciona el de la derecha. Esperemos que lo siga haciendo por que si lo peor llegara a pasar, les informamos que tenemos sólo  tres paracaídas y Uds. son cuatro,  así que vayan pensando  que hacer" y gesticulando  nerviosamente,  la azafata los muestra y deja en uno de los sillones vacíos. 

Gran revuelo y muchos ¡ohes y ahes! y ¡Ay señor Dios mio!.... in nomine pater et fili....... El cantante que siente que se va a mear encima,  va corriendo al baño. El político, tose nervioso. El economista histéricamente,  teclea en  la calculadora.

¡Cataplun!  se para el motor de la derecha. 
-
"Su atención señores pasajeros: Esta es una grabación,  se ha jodido el segundo y último motor,  hemos puesto el piloto automático y ya nos hemos arrojado en nuestros  paracaídas, así  que antes de que  se hagan puré,  les sugerimos  que se coloquen los paracaídas y  vayan  saltando de a uno.  Como saben, uno de Uds. deberá sacrificarse por el bien común". 

Los pasajeros se miran con ojos desorbitados, pelos parados y bocas abiertas; gritan, putean, bendicen, maldicen; al final deciden tirar a la suerte quien se arrojará con el primer paracaídas.

Gana el cura que con velocidad super-sónica  se ajusta el paracaídas y se arroja gritando: "hijos míos les doy mi bendición".

Tiran a la suerte de nuevo, esta vez, gana el político,  agarra uno de los paracaídas que quedan  y se arroja  gritando: "viva la democracia". 

Quedan el economista y el hippy.  El economista con voz melosa  le dice al cantante  hippy:  "Tengo una cuenta bancaria de 12.000.000 de euros, una casa en las Bahamas y una en Tailandia, un apartamento el Nueva York y un Edificio en Madrid, todo eso es suyo si me deja  ponerme el paracaídas y saltar ahora". 

El cantante lo piensa, lo mira, levanta una ceja, levanta la otra, esboza una sonrisita nerviosa y le dice: "¡Ok, man!, está bien, lo haré,  pero lo quiero todo por escrito  y con su firma, por favor. Y  no se olvide de poner el Nro de cuenta completo, nombre de Banco y claves, ya que estamos".

El economista con pulso tembloroso  escribe y firma todo según lo convenido y le entrega el papel. El hippy lo lee,   lo dobla y guarda en un bolsillo de su chaqueta al tiempo que el economista se ajusta el último paracaídas  y salta;  pensando en el idiota que está a punto de estrellarse, larga una carcajada.

Con un gran estruendo, cae el avión y al chocar en las rocas,  brotan llamas y humo negro. ¡Ufff, que desastre!

En el cielo, contento  el economista va bajando, cuando ¡Ups!.... ¿qué ve? ¡¡Al hippy bajando muy orondo en otro paracaídas!!  Sin entender nada  le grita: "Hombre ¿¿pero, cómo hizo, si yo agarré el último??".  El hippy lo mira y le contesta:  ¡¡ah.... pues mire, el político -going in the wind-  bajó en mi mochila!!



(El chiste es anónimo y  más viejo que Matusalén, pero lo saqué de mi galera y refaccioné)

¡¡Muy buena semana para todos!!.





Saturday, January 28, 2017

Hacerse a la mar - 5, o los amores de Belisario y Antonina, o los de Teodora y Justiniano, Siglo VI, o la envidia de mi hermano Procopius (2)


Viene de aquí




¡Cómo recuerdo ésta, mi primera travesía! (1): El día era soleado y los vientos propicios traían consigo  el olor a salitre;  el contramaestre  impaciente y alerta   esperaba la orden de su comandante, el general  Belisario para  levar anclas y zarpar del puerto de  Constantinopla con dirección a Siracusa, en Sicilia,  y luego a  Cartago, Norte de África, en la campaña contra Guelimer, Rey -usurpador (2)- de  los Vándalos,  ordenada por el Emperador Justiniano I, el año era  532  y ya habían  sucedido las revueltas de Nika en la Capital del Imperio (que casi le cuestan el trono, de las que hablaré en otro momento). Esta sería la primera guerra de reconquista de los territorios del Imperio Romano de Occidente que habían caído en poder de los bárbaros, misión que nuestro emperador  consideraba sagrada. Con una flota de 17.000 mercenarios -10.000 de infantería y  de entre 5 y 7.000  de caballería- todo cargado, desplegadas  las  tres latinas -que así se llamaban las velas-  y tensa, muy tensa,  toda  la jarcia muerta;   los remeros -robustos esclavos- distribuidos en una  fila  de veinticinco hombres a babor y 25 a estribor,  remaban al compás del tambor Taaam- taaam - tam tam;  en formación  nos seguía el resto de la flota imperial.   El   cómitre  caminaba por la crujía los  más o menos 40 metros  de popa a proa  y viceversa, asegurándose de que todo estuviera  en orden y de que los remeros se dejaran, en efecto,  el lomo en cada palada. Belisario en la Popa, en su Skené -carpa- descansaba unos minutos sobre su litera de la ciática  que inmisericorde lo aguijoneaba desde la cintura y le recorría toda la pierna derecha como una maldita corriente eléctrica;  apuró unos sorbos de vino de Modona y   estimulado por el calor del vino y los masajes  que Antonina, su mujer, le hacía con grasa de castor mezclada con raíz de jengibre y  pesuñas de cabra molidas, medio  entre  enfurruñado  y beodo  con vehemencia clamó: "¡A tomar por  culo la Paz Perpetua conseguida por Genserico con nosotros,   los romanoi,  en 474",   (Este rey  vándalo fue bisabuelo del actual, al que Belisario  tenía entre ceja y ceja y deseaba tanto encadenar). 





Bitácora de a bordo:  Septiembre 13 de 533, Batalla de Ad Decimum, victoria del Ultimus Romanorum, Comandante Supremo  de todas las fuerzas de Oriente del Emperador Justiniano: El General Flavio Belisarius, acompañado de su esposa Antonina, sus cronistas de abordo oficiales -y no oficiales, como la que esto escribe-,   sus  50 remeros,   soldados, etc, etc etc,  en su  dromón  y el resto de la flota, desembarcaron en Caputvada, en  las costas de África, como 18 km al sur de Cartago (3). El rey Guelimer ante el  inminente ataque romano decidió dividir sus fuerzas (unas 11.000 en total),  una parte  comandadas por su sobrino y otras por su hermano. El hermano muere en batalla, el sobrino no logra encerrar las tropas romanas por los flancos. La carnicería es feroz y los vándalos se desbandan. Guelimer abadona Cartago   que, huérfana,  se rinde y Belisario  y Antonina se sientan muy orondos en el trono  de dicha ciudad. La victoria definitiva, empero, la obtuvo  Belisario en la Batalla de Tricamarum casi 4 meses después,  en la que este persiguió a Guelimer hasta  la ciudad de Hipona, en Numidia -la misma de san Agustín -(4) en donde lo capturó y de paso, ya que estamos, se hizo con la ciudad y sus tesoros. Este fue el tristísimo fin del reino vándalo, cuya historia resumida, para evitar cansar a mis lectores, he relatado obviando  detalles de como me trataban mis compañeros y de cuanto hube de maquinar industrias para que no descubrieran mi condición de mujer en medio de tal marea de pitos, remos y flautas. 


Belisario y Antonina regresaron a Constantinopla con el tesoro vándalo y Guelimer encadenado, tapando de paso la boca de todos sus enemigos que gran envidia le profesaban y en su ausencia habían tramado, por todos los medios, desprestigiarlo. El desfile fue  Triunfal y Belisario recibió  de manos del mismísimo Emperador Justiniano su tan bien merecido Triunfo, quien regocijado quedó con tanto tesoro y reo apresado. Y la Emperatriz, aún más.



Flavius Belisarius


 Continuará  y en la próxima, les hablaré de mi emperador y su mujer.


 Notas:

(1) Relata Procopina de Cesarea: personaje ficticio  creado por mi como contrapunto a Procopio de Cesarea.
(2) Guelimer usurpó el trono a  su primo Hilderico
(3) Actual Tunes
(4) Actual Algeria. 






Friday, January 27, 2017

El Arzobispo Damaskinós Papandreou y el jefe de la Policía de Atenas Angelós Evert y el rol de Grecia con respecto a los judíos, durante la Ocupacion alemana en la era del Tercer Reich



El Arzobispo Damaskinos Papandreou nació  con el nombre de  Dimitrios Papandreou en Dorvitsa, Grecia en 1890; se alistó en el ejército griego durante las guerras de los Balcanes,  fue ordenado sacerdote de la iglesia ortodoxa griega en 1917 y  nombrado arzobispo de Atenas en 1941.

Durante el Holocausto, el arzobispo Damaskinos  junto con el jefe de la policía de Atenas Angelos Evert  protegieron a miles de Judíos griegos.

Aunque se estima que el 87% de la población judía de la nación -60.000 a 70.000 Judíos griegos- perecieron durante el Holocausto, 10.000 sobrevivieron, en gran parte debido a la negativa del pueblo griego a cooperar con los planes alemanes para deportaciones.

Con la llegada de la ocupación de la  Alemania Nazi, las deportaciones de judíos de ciudades como el puerto septentrional de Tesalónica procedieron a un ritmo rápido. Muchos Judíos que huyeron  de la persecución en el norte,  encontraron un refugio seguro en Atenas.

El 20 de septiembre de 1943, Dieter Wisliceny - un adjunto de Adolf Eichmann, el arquitecto de  de la Solución Final nazi - llegó a Atenas. Wisliceny ordenó al  Gran Rabino Elias Barzilai a comparecer ante él, para que le proporcionara  cifras exactas y listado de  la población judía en Atenas,  para asi crear un consejo judío compuesto de Judíos que eran  obligados a afiliarse  al consejo  a la vez que se los hacía "responsables" de mantener la ley y el orden en la  comunidad judía  y también se les podía utilizar  como enlace entre las autoridades alemanas y la población judía.

Conmocionado  por su encuentro con el comandante nazi, el Rabino  contactó al  Arzobispo  ortodoxo Damaskinós  a quien   relató los tenores de la  reunión.  Como  Damaskinós sabía lo que había ocurrido en el norte, le sugirió que toda la comunidad judía se refugiara  en las montañas   ya que  en Atenas no podría ser protegida.

El Rabino Barzilai, para ganar tiempo,  pidió a los alemanes   tiempo adicional para componer las listas solicitadas, y luego, después de reunirse con otros líderes de la comunidad judía, destruyó los registros de la comunidad aconsejando  a los judíos que huyeran. Unos días más tarde, el propio Rabino salió de la capital y se unió a la Resistencia.

La Iglesia de Grecia, bajo el liderazgo Damaskinos, condenó los planes  de las deportaciones  ordenadas por Hitler  en su  país y dio instrucciones a los sacerdotes para anunciar su posición en sus sermones.

Los judíos  habían participado libremente con otros griegos en todos los ámbitos de la vida durante 2.300 años, coexistiendo en armonía con sus compatriotas ortodoxos, contribuyendo buen trabajo en numerosos campos. Judíos había vivido en Atenas desde la época de Alejandro Magno, a mediados del siglo IV, muchos habían  buscado refugio en Grecia después de haber sido expulsados ​​de España en 1492. Durante el Holocausto, la población judía griega fue casi completamente destruida.

 

Mientras se preparaban para iniciar  las deportaciones  e implementar  la solución final (el asesinato en masa), los nazis compilaban  informes de inteligencia sobre la población judía de Atenas. Eligieron importantes fiestas judías para  sus actos monstruosos, por ejemplo,  dar  una orden en la víspera de Iom Kipur (El día del perdón), firmada  por el comandante militar alemán en Atenas, Comandante de las  SS y Policía,   Jürgen Stroop (este  fue el  que aniquiló el Gueto de Varsovia en abril 1943, después de la revuelta judía,  y que fue asignado a Grecia el 8 de Sept de1943, pero  al mes. dada su crueldad y el rechazo de la policía local, con Evert a la cabeza,  fue relevado del mando y asignado a otro destino). 

La población judía en Atenas había aumentado desde el estallido de la guerra. Damaskinos, Evert y el  Rabino,  habían  transformado la ciudad en un refugio seguro. Dado que muchos de los Judíos recién llegados no tenían lugar fijo de residencia, la inteligencia alemana sobre la población judía fue a menudo deficiente.

Por causa de la orden emitida por Stroop, los Judíos fueron  obligados  a comparecer en las oficinas de la comunidad dentro de los cinco días para  declarar sus residencias y registrar sus nombres. A pesar de la amenaza de consecuencias nefastas  por  no presentarse, solamente 200  lo hicieron.

En un caso similar, las autoridades alemanas anunciaron que estaban planeando traer una harina especial a Atenas para la Pascua, por lo que la población judía podría preparar matzá - pan ácimo- siempre que no estuvieran dispuestos a revelarse y registrarse ante las autoridades. A pesar de que este  falso acto de bondad tentó a   algunos,  otros se registraron  porque temieron represalias nazis en sus vecinos cristianos, que los estaban protegiendo.  (Falso acto de bondad: porque eran excusas para apresarlos).

Cuando los alemanes comenzaron a reunir a los Judíos, más de 600 sacerdotes ortodoxos griegos fueron detenidos y deportados a causa de sus acciones para ayudar a Judíos y muchos Judíos fueron salvados por la policía griega, el clero y la resistenciaDamaskinós y Evert enfrentaron amenazas reales  de muerte por sus esfuerzos y seguramente habrían  sido asesinados si los alemanes hubieran  sabido   el verdadero  alcance de su labor.

Hubo varios medios de evacuación. Muchos dejaron en barco desde Oropo en el Ática, donde con frecuencia eran obligados  a pagar enormes honorarios por  un viaje de tres semanas a Turquía. Algunos hombres jóvenes sin familia escaparon a campos de partisanos  en las montañas, certificados de bautismo falsos y nuevos documentos de identidad de la Iglesia ortodoxa griega también  ayudaron  a judíos a escapar. El Arzobispo Damaskinos supervisó la creación de varios miles de tales certificados, y el jefe de la policía de Atenas Evert proporcionó más de 27.000 papeles falsos de identificación.  

El Arzobispo también ordenó a los monasterios y conventos en Atenas que facilitaran  vivienda a los judíos perseguidos:  como resultado de estas acciones, más de 250 niños judíos fueron escondidos por el clero ortodoxo.

Cuando todas las apelaciones oficiales para detener las deportaciones fallaron, el Arzobispo Damaskinós encabezó un llamamiento directo a los alemanes, en la forma de una carta compuesta por el famoso poeta griego Angelos Sikelianos   y firmada por los ciudadanos griegos prominentes  en un audaz intento de apelar a los corazones y las mentes de las autoridades de ocupación  en defensa de los Judíos que estaban siendo perseguidos.

La carta incitó la ira del  Comandante nazi  Stroop, quien amenazó de muerte  al Arzobispo   con un pelotón de fusilamiento.   La respuesta inmediata de Damaskinos fue:
"A  los líderes religiosos griegos no se les dispara, sino que son colgados;  solicito que se respete esta costumbre".  El valor  del líder religioso tomó por sorpresa y desarmó al Comandante y  aquel salvó la vida.

La Declaración  del Arzobispo y sus compañeros griegos es única; no existe un documento similar de protesta a los nazis durante la Segunda Guerra Mundial que haya salido a la luz en cualquier otro país europeo. He aquí a continuación fragmentos de la carta:

 "La Iglesia ortodoxa griega y el mundo académico del pueblo griego,  protestan contra la persecución ... El pueblo griego está ... muy triste al saber que las autoridades de ocupación alemanas ya han comenzado a poner en práctica un programa de deportación gradual de la comunidad judía griega ... y que los primeros grupos de deportados ya están en camino a Polonia ... De acuerdo con los términos del armisticio, todos los ciudadanos griegos, sin distinción de raza o religión, iban a ser tratados por igual por las autoridades de ocupación. Los Judíos griegos han demostrado  ser valiosos contribuyentes al crecimiento económico del país [y] respetuosos de la ley los ciudadanos que entienden plenamente sus funciones como griegos. Ellos han hecho sacrificios por  el país griego y han estado siempre en la primera línea de la lucha de la nación griega para defender sus derechos históricos inalienables ... En nuestra conciencia nacional, todos los hijos de la Madre Grecia son una unidad inseparable: son miembros iguales de la entidad nacional independientemente de la religión ... Nuestra santa religión no reconoce cualidades superiores o inferiores basadas en la raza o la religión, tal como  lo indica: "No hay ni Judío ni griego" y por lo tanto condena cualquier intento de discriminar o crear diferencias raciales o religiosas. Nuestro destino común tanto en días de gloria y en los períodos de desgracia nacional han  forjado lazos inseparables entre todos los ciudadanos griegos, sin excepción, independientemente de la raza ...Hoy estamos ... profundamente preocupados por el destino de 60.000 de nuestros conciudadanos que son Judíos ... hemos vivido juntos tanto en la esclavitud y la libertad, y hemos llegado a apreciar sus sentimientos, su actitud fraternal, su actividad económica  y más importante, su patriotismo indefectible ... " 


Durante la Segunda Guerra Mundial, Grecia perdió 580.000 seres humanos,  que antes de la guerra tenía una población de 6,5 millones de hab., unos  100.000 griegos  resultaron heridos en  combate. Griegos ordinarios se pusieron en peligro mortal en protesta por las autoridades de ocupación. En el caso de la población judía de Atenas, la asimilación y un fuerte movimiento de resistencia,  ayudaron al menos algunos griegos judíos a sobrevivir al ataque nazi. Cinco mil Judíos permanecieron en Atenas, ayudando a reconstruir la vida judía en Grecia de la posguerra. El gobierno griego  ve la herencia judía como parte del patrimonio nacional del país y  ha renovado  el Museo Judío de Grecia,  en Atenas, un sitio de honor entre muchos tesoros históricos de la nación. La  sinagoga más antigua de Grecia es una ruina del siglo V a EC  situado en antiguo mercado de Atenas, el ágora, al pie de la Acrópolis. 

Después de la guerra, el arzobispo Damaskinos sirvió como regente de Grecia hasta que el rey Georgios II regresó del exilio. Cuando estalló la lucha entre los pro-realistas soldados griegos y partidarios comunistas en 1945, el arzobispo fue nombrado Primer Ministro que exhortó a la paz y el orden en el país ; renunció a su posición de liderazgo cuando el rey fue llamado formalmente en 1946.


El Arzobispo  Damaskinós murió en Atenas el 20 de mayo de 1949.


Artículo escrito por: Margie Burns. Entre paréntesis aclaraciones mías y el resaltado en negrita es mio, al igual que la traducción.

Original en Inglés aquí

Bibliography:

Wednesday, January 25, 2017

De mesa de trucos a diálogo intercultural en "La española inglesa" de Cervantes






Escribir sobre las Novelas Ejemplares de Cervantes, con los ríos de tinta que se han escrito sobre ellas, no deja de ser un desafío y hasta una temeridad, pero como prometí contribuir al Club de Lectura virtual  de La Acequia que iniciamos en el 2008 con la Primera Lectura Virtual del Quijote para la web 2.0  heme aquí ante esta mesa de trucos,  en la que Cervantes juega con el lector;  que no tartamudea si dice verdades, pero  nada es lo que parece, mientras busca entretener sin hacer mal a nadie y de paso, que el lector saque provecho  de lo leído, que a buen entendedor pocas palabras bastan o... como él dice en el prólogo a sus Novelas:  (...) será forzoso valerme por mi pico, que, aunque tartamudo, no lo será para decir verdades, que, dichas por señas, suelen ser entendidas. Y por sino nos quedó claro, remata   con este final: Sólo esto quiero que consideres: que, pues yo he tenido osadía de dirigir estas novelas al gran Conde de Lemos, algún misterio tienen escondido que las levanta.

En la española Inglesa estamos frente a una novela -dicen los expertos- del tipo fantástico, una novela  del género bizantino que narra sucesos "de lo más inverosímil que imaginarse pueda"  (Sg. Schevill y Bonilla, en introducción  mi libro JM SA ed. Madrid, Esp. 2000). Pero  develemos  los misterios escondidos -verdades (además de la obvia pericia técnica)- según y como yo lo veo.

La propia historia de la bella e inteligente  niña  española  Isabela (estrella, rayo de sol, cometa, luna; de tan buen natural, honrada, que con facilidad aprendía....)   -raptada  por los ingleses  ( en la novela) en el saqueo a Cádiz  en 1596 (real)   y sus amores con Ricaredo, el gallardo e intrépido  joven inglés estilo-dios-Marte  de ensortijados cabellos dorados, armadura brillante y 1,80, con el que se crió  en casa de sus raptores   siendo ella  despojo-prisionera-esclava-sirvienta-hija- es como un manto que cubre otra y otra (dependiendo de cuantas lecturas se hagan)  hasta llegar al núcleo. En  esta novela, triunfa el amor espiritual sobre el físico (Ricaredo desposa a Isabela aún cuando estaba fea, producto del envenenamiento)  y defiende,  acorde con los tiempos, el Patriarcado (por cuanto defiende el valor del matrimonio sobre el de la soltería en un convento o en otra parte).

En la época histórica en la que Cervantes sitúa el relato, las relaciones entre España e Inglaterra eran conflictivas, no hacía mucho que la Armada invencible de Felipe II había atacado a Inglaterra  y un año antes,   el corsario inglés  Francis Drake había atacado Cadiz. La paz entre ambos imperios de firmó recién   en 1604, para ese entonces, ni la reina Isabel I de Inglaterra, ni el rey Felipe II de España estaban vivos.  Y ya que hablamos de fechas, sabemos que Cervantes vivió en Andalucía  entre 1587 y 1603... y mi abuelo materno  nació en 1890 :-)   Hay quienes (p ej  Amenzúa, Lapesa) datan  la escritura de esta novela entre 1604 y 1606, o un poco más tarde hacia 1611 (Pellicer), a mi me gustaría situarla lo más tarde posible porque: 

Llama la atención, como Cervantes muestra en su relato balance entre los caracteres de los españoles e ingleses, por ejemplo, la voluntad y sabiduría del Conde de Leste que se negó a que su capitán Clotaldo raptara a la niña (aunque igual lo desobedeciera).  O el cariño y esmerada educación que la niña Isabela recibe a pesar de su cautiverio  en casa de Clotaldo y Catalina  (ingleses, en secreto católicos). O la forma humana y positiva  en que Cervantes retrata a la reina Isabel etc. (aunque no falten los personajes perversos  e envidiosos como la Camarera real y su hijo el conde Arnesto), si bien es cierto y oportuno recordar que la Reina Isabel (histórica) implementó una política de tolerancia religiosa siempre  que sus súbditos se mantuvieran leales a la Corona y explotó los ideales de "su virginal pureza" para permanecer sola en el trono de Inglaterra, sin ningún marido que coartara su poder, algo que nada tiene que ver conque rechazara o no  la sexualidad. 
.
Si consideramos que esta novela fue escrita posteriormente a la firma del Tratado de Paz y sabedores de la ascensión a trono de Inglaterra de Jacobo I, católico, podría ser acertado inferir que Cervantes modulara su anterior animosidad (ver poemas y canciones) para decantarse por una visión de mayor apertura hacia el entendimiento de ambos pueblos  incluso con la esperanza, quizás, de que Inglaterra volviera al catolicismo.

Ricaredo, inglés católico tapado, se muestra magnánimo con los españoles apresados a los hora de   abordar los bajeles turcos, cuyo botín lleva a la reina Isabel.  Es así que libera a los padres de Isabela apresados por los turcos.  Su recompensa será al final de todas las peripecias, el matrimonio con su amada, la que creyéndolo muerto estaba a un pie de entrar en el Convento.  El matrimonio vendría a significar, entonces,  la tan merecida recompensa  a ambos por el largo camino de esfuerzo, perseverancia y amor, porque  Amor, muy señores míos,  omnia vincit.

No  sólo el dialogo intercultural es fluido a lo largo de la novela, es notorio para mi   la oposición entre la nobleza hereditaria (saqueadora, envidiosa, decadente)  con la floreciente sociedad mercantil a la que Ricaredo pertenece  (que crea riqueza en virtud del comercio, del trabajo y que realiza  a tales efectos, transferencias de dinero  internacionales).  Estas florecientes relaciones comerciales además de generar diálogo intercultural generan riqueza, o quizás sea a la inversa; porque generan diálogo intercultural, generan riqueza y bienestar.   Quizás sea esta la lección/verdad escondida que "el manco de Lepanto" y ex-cautivo de Argel,  nos legara en este escrito:

En el diálogo intercultural se gana más que en la guerra. 


Contribución a la lectura colectiva virtual que hacemos bajo la conducción de Pedro Ojeda desde su blog: La Acequia   © Myriam Goldenberg


Monday, January 23, 2017

Contemplando las mujeres de Johannes Veermer (1632-1675) maestro de la intimidad, la luz, el color y la textura
















































                                                          




















Catálogo de las pinturas, aquí (nombre, datación y ubicación actual)


Más sobre las mujeres de Veermer aquí ( en Inglés)






Al periodista y crítico de arte francés del S XIX, Theophile Thoré, debemos el re-descubrimiento de Johannes Vermeer, quien a su muerte dejó a su viuda  y once hijos  en su casa en Delft, Paises Bajos (Holanda),  en graves dificultades económicas y su obra caída en el olvido hasta que... :-)

Dos aspectos de su obra quiero resaltar:  la serena dulzura y delicada naturalidad en estas mujeres, algo  que me conmueve profundamente  y el cuadro dentro del cuadro con toda la simbología que implica: por ejemplo  en el cuadro de la mujer que tiene la balanza, podrían leerse sus pensamientos  respecto a lo justo e injusto, lo probo i lo ímprobo de esta vida terrena y la celestial, si observamos con detenimiento el cuadro al fondo, por la expresión de éxtasis meditatativo  de su rostro quizás se diga a sí misma: " vanitas, vatitatum, todo es vanidad" y esté pensando en la gloria futura.  Veermer por su mujer era católico, en un país protestante y eso se transluce en su obra.