Friday, November 1, 2013

Palmeras en el desierto, ven





Ven, acompáñame, esta vez no quiero ir sola.
Ven, comparte sin miedo estos instantes.
No voy a robar tu corazón, te lo prometo,
mas te quisiera cerca
unos días, unas horas, cuando el crepúsculo
se asomara en el desierto
y la nube de arena nos envolviera como manto sagrado,
en las tinieblas, obligándonos
a cubrirnos con la manta.

Ven, acompáñame. Sólo una vez
siente el palpitar de los luceros a la noche
y el ritmo acompasado de nuestras
respiraciones
en la tienda peregrina
que juntos erigiríamos
aquí,
en el desierto,
mío también,
cerca de estas palmeras
y luego, caminante, seguirías tu camino
con tus alforjas repletas de agua, dátiles y miel.




(c) Marianne Gambell (Myriam Goldenberg)







29 comments:

LA ZARZAMORA said...

No hay que implorar...
Que corran esos caminantes en busca de nuevos rumbos.
Y esperemos mientras esos dátiles de risa y miel.
:)
Besos, Myr.

Unknown said...

Lo que te decía en mi respuesta a tu comentario.... ¡me gusta pasar por tu casa! siempre me dejas una sensación diferente con cada post, el de hoy, cuando cierro los ojos, me parece oírme a mí misma recitando despacito tan bonitas palabras.

No, Myriam, no tienes que agradecer nada, es un placer.

Besos apretaos.

Tracy said...

Te acompaño ya.

Genín said...

Yo que el, te acompañaba sin dudarlo un momento... :))
Besos y salud

Colotordoc said...

En Venezuela se les dice Chaguaramos...

Iría con cualquier nombre.

Besote guapa

María Pilar said...

Con palabras así más de uno se dejará robar el corazón.
Besos Myriam

Myriam said...

MANUEL: el chaguaramo (roystonea oleracea) no es la palmera datilera (Phoenix dactilífera) que abunda aquí y que ves en esta foto, aunque se parezcan un poco. Un abrazo

Bertha said...

Dátiles,miel,agua:unos buenos ingredientes para seguir el camino después de saborear el crepúsculo bajo esas palmeras son inolvidables

Muy bello Myriam!

manouche said...

Me recuerda la cancion "si solo tienes una minuta dedicala a mi"...

chusa said...

Qué imagen tan bonita del amor querida Myriam. Espero que estés disfrutando de un estupendo inicio de noviembre, tal vez acompañada por tus preciosas nenas y tu compañero de viaje.
Un abrazo,
Chusa

Aristos Veyrud said...

Con semejante invitación a cualquiera le roban el corazón y ni cuenta se da, el problema estaría en que después quiera irse ja ja ja
Hermoso poema querida Myr!!!
Besos Poeta!!!

Nómada planetario said...

¿Quién podrá declinar tan amable invitación?
Besos desde una ciudad invadida por miles de "puenteros".

Spaghetti said...

No me lo pidas otra vez, que últimamente me estoy volviendo muy obediente,,,jeje

Tatiana Aguilera said...

¡Ya!, yo quiero algo así. ¡Qué romántico querida Myriam!. Imaginaba la escena y me dejé llevar entre las dunas, palmeras y camellos que dibujaban el paisaje...
Un abrazo siempre.

Humberto Dib said...

Tus texto son muy frescos, Myriam, me gustan.
Un beso grande.
HD

TORO SALVAJE said...

Este poema es una invitación irrechazable.

Merece un sí gigante como respuesta.

Besos.

Gustavo Figueroa Velásquez said...

Me quedaría contigo en el desierto,
descubriendo y sintiendo el palpitar
de aquéllos luceros nuevos y lejanos;
junto a ti, en esa tienda peregrina,
sentiría que existes en tu respiración
y verías que vivo cuando me miraras,
compartiríamos las mieles exquisitas
de estos dátiles hechos flama
reservados sólo para ti.
Te recitaría a tu oído "me gustas cuando callas porque estás como ausente..."
y sin que me hubieras robado el corazón
beberíamos de nuestros labios,mutuamente,
la energía necesaria
para vivir los dos
en éste, tu desierto más intimo,
y sentir como sienten los humanos.
¡Me quedaría contigo,siempre!

Bellísimo poema nos regalas mi querida Myriam.
Recibe un puñado de besos y toda mi admiración.

Abejita de la Vega said...

Una palmera es buena compañía.

Ishtar said...

Que estupenda descripción! Un encuentro que ya sabe a pérdida y aún así se saborea el disfrute del placer de unos instantes y del recuerdo. arena y miel

Amores nómadas. Arena y miel.

Un abrazo.

Javier Rodríguez Albuquerque said...

Listo para acompañarte.

Katy said...

A veces no nos apetecen más que unos instantes de felicidad, uno rayo de luz, una tienda para descansar.
Bellos versos para acompañar un atardecer.
Bss

Pedro Ojeda Escudero said...

Entre la tristeza de no haber tenido ese momento y la tristeza de la despedida posterior.
Qué poema más sentido, Myriam.
Besos.

Pamisola said...

Pidiéndolo así,Myriam seguro que te acompañó. Un bonito poema, para una petición precisa y convincente.

Abrazos.

Kasioles said...

Y yo cojo tu mano y paseo contigo por ese desierto para contemplar el cielo de esa maravillosa noche, más tarde te dejaré libre el camino para que él te acompañe.
Aprovecho para decirte que hoy es el cumpleaños de André de Artabro, aún estás a tiempo de felicitarle, se alegrará.
Cariños en el corazón.
kasioles

Fernando López said...

Bonita poesia y foto. Me encanta el desierto. besos y buena semana

I. Robledo said...

Bella invocacion, amiga, como lo es esa imagen que nos brindas

Un abrazo

Antonio said...

La arena del desierto te cubre con su manto para que tu te cubras con la manta del amor...
Besos

Paco Cuesta said...

Un solo momento de felicidad compensa cientos de penurias.
Besos

OceanoAzul.Sonhos said...

Saudades de passar pelo teu espaço.

Um abraço
cvb