Convocatoria de Inma desde su blog "Molí del Canyer" con el tema: Calor de Hogar
Donde flamea la llama del amor, está tu hogar. No importa si vives en una gran mansión o en una casa rodante. Eso lo experimentaron Carla y Roger cuando fueron expulsados del exclusivo Condomio de Coney Island y no les quedó otra opción que huir, llevándose sólo lo esencial, para así poder limpiar su nombre. Las pruebas los incriminaban. No había tiempo que perder. La única certeza que tenían era la de que alguien los odiaba. Y los odiaba tanto como para tomarse todo ese trabajo de falsear las evidencias. Roger recogió los documentos con otras identidades, credenciales y armas de un cofre secreto que tenían para ocasiones extremas y esta era una de esas. Mientras, Carla cambiaba las placas a la casa rodante y preparaba los víveres que se llevarían. Cuando terminaron con las maletas y cerraron su casa, emprendieron viaje hacia el norte, hacia una casa segura.
Como la ruta iba a ser larga y Roger conducía, Carla dejó vagar su mente a sus tiempos de joven estudiante universitaria. Recordó algunos párrafos de una de sus lecturas favoritas:
El Lar danzante, Museo Capitolino,, Roma, 1 EC
"El fuego sagrado, que tan estrechamente asociado estaba al culto de los muertos, también tenía por carácter esencial el pertenecer peculiarmente a cada familia. Representaba a los antepasados; era la providencia de la familia, y nada tenía de común con el fuego de la familia vecina, que era otra providencia. Cada hogar protegía a los suyos."
"Esta religión estaba íntegramente encerrada en los muros de la casa. El culto no era público. Al contrario, todas las ceremonias sólo se realizaban entre la familia. El hogar jamás se colocaba fuera de la casa, ni siquiera cerca de la puerta exterior, donde el extraño lo hubiese visto de sobra. Los griegos siempre lo colocaban en un recinto que lo protegía del contacto y aun de las miradas de los profanos. Los romanos lo ocultaban en medio de la casa. A todos estos dioses, hogar, lares, manes, se les llamaba dioses ocultos o dioses del interior. " [Pag 30]
"Lo que une a los miembros de la familia antigua es algo más poderoso que el nacimiento, que el sentimiento, que la fuerza física: es la religión del hogar y de los antepasados". [Pag 34]
[de "La Ciudad Antigua", por Fustel de Coulanges, 1864]
- ¿En que piensas?- le preguntó Roger interrumpiendo sus pensamientos
- Es que extraño mucho a mis padres.....Cuando te sientas cansado te relevo al volante, Roger -continuó, cambiando de tema.
Nota: Las imágenes son de la red.
hasta en una casa rodante hay presencia amical de dioses y antepasados...
ReplyDeleteEl hogar somos nosotros y el calor precede de nuestro interior no importa que la chimenea (hogar) está apagada. Abrazos
ReplyDeletePorque hogar viene de hoguera. Y para que haya hogar debe haber calor y abrigo.
ReplyDeleteUn abrazo, Myriam.
El hogar está donde te encuentres cómodo, desde una cueva, una tienda de campaña, una furgoneta o la mejor casa del mundo, incluso al aire libre y mirando las estrellas puede ser tu hogar.
ReplyDeleteSaludos
me gustan las csas rodantes las nuevas son increibles.Me gustaria tener una y recorrer lugares asi de entrecasa casi sin vestirme
ReplyDeleteMuy buenas Myriam, hay algo importante en esta convocatoria y es que tenemos claro que el amor es el eje principal de crear un hogar, así pues da lo mismo donde estemos siempre que tengamos ese calor, esa llama que nos calienta por las noches, días y tardes y eso se llama amor, cariño, compañía, complicidad y un motón de adjetivos y nombres más. Me gusto tu exposición. Un besote grande.
ReplyDeleteMyriam, qué bien combinas el presente con el pasado.
ReplyDeleteMe ha gustado muchísimo. Contigo siempre aprendiendo.
Un abrazo.
Pero aunque de vez en cuando tiren las nostalgias o esos recuerdos...-Lo importante, es estar unidos en las adversidades: como en este caso que los dos saben que tienen que pagar un precio y el hogar es en cualquier lugar a la par con ese calor que desprende el cariño.
ReplyDeleteJueves día de leeros vuestras reflexiones: me gusta el día y las lecturas que no decaigan
Un abrazo feliz finde
Para mi la diferencia entre una casa y un hogar es esa, el hogar es el sito al que quieres volver, la casa es sólo el lugar donde duermes ;)
ReplyDeleteSobre todo me quedo con la primera frase "Donde flamea la llama del amor, está tu hogar." Al final, la pareja protagonista se llevó consigo su hogar.
ReplyDeleteUn besazo, Myriam
Hola, Myr.
ReplyDeleteEl extracto del libro es la mar de interesante. El concepto de religión basado en la esencia de los ancestros, los dioses del hogar, los que nos cuidan y protegen.Ahí donde brote la llama del hogar está el tuyo. Va muy a colación de la frase que encabeza tu texto.
Un beso muy grande :-) Cuídate mucho.
La adversidad acrecienta la sensación de union. Poco importa el lugar que dejan atrás.
ReplyDeleteCoincido con Mag en lo de la religión del hogar y los antepasados muy oportuno para el próximo lunes.
Bedoss Míriam
Es cierto que el significado de hogar lo llevamos nosotros, emana de nuestro interior. Lo es en la infancia y en la madurez, cuando los padres se fueron hace un tiempo...
ReplyDeleteMuy buena entrada...
Como me gusta leerte mi querida Myriam.
ReplyDeleteMe ha gustado mucho el relato, magnífico.
Un fuerte abrazo lleno de cariño.
Muy interesante el origen de esa expresión, oportunamente dramatizado en un ingenioso relato. Un abrazo
ReplyDeleteExcelente, me gustó este post, todos oos que participan de la propuesta juevera son muy imaginativos.
ReplyDeleteBesazo de jueves...
Hola. Vengo de leer tu artículo acerca de "El León de Arabia"... Buenísimo... me enganché de principio a fin.
ReplyDeletePero antes había venido para darte las gracias por tus observaciones acerca de la conquista de Constantinopla que se la atribuí a Suleimán y eso no es cierto.También gracias por la observación acerca de los jenízaros.
En contacto y de nuevo UN MILLÓN DE GRACIAS
Que mezcla!! Has pasado del presente a un pasado lejano en un plisplas y como siempre que te leo he aprendido sobre lo sagrado del hogar en otras culturas. Gracias por participar, besos.
ReplyDeleteUn dios lar y el fuego efectivamente se disponían en la parte más íntima del hogar la más cercana a sus habitantes Juntos creaban hogar Gracias por traernos estos datos Un abrazo
ReplyDeleteHemos coincidido en expresar lo que es el calor de hogar aunque en contextos muy diferentes.
ReplyDeleteY me alegro de esa coincidencia.
Un enorme beso, Myriam.
Es que así es, cada lugar donde dejamos jirones de piel es un hogar.
ReplyDeleteUn abrazo, y buen finde
Tal vez el verdadero hogar no es un espacio físico está más entroncado a los sentimientos, la familia y los recuerdos.
ReplyDeleteUn beso, Myriam
Cierto es, el hogar puede estar en cualquier sitio donde exista un poco de amor.
ReplyDeleteUn placer leerte
Besos
HOLA A TODOS: muchas gracias por vuestros comentarios. Arazos a repartir.
ReplyDeleteQuerida Myriam, tus relatos siempre son una sorpresa y, además, no solo nos entretienen sino que, además, nos aportan culturalmente como en este "Calor de hogar" Hogar y lares.
ReplyDeleteExcelente, amiga mía. Feliz fin de semana.
En el fondo, siempre seremos unos serse expulsados de la casa familiar.
ReplyDeleteBesos.
Nosotras, con nuestras vivencias y recuerdos, somos las que damos calor al hogar, pero, sobre todo en estas fechas, es cuando más añoramos a todos los que ya no están.
ReplyDeleteTe deseo todo lo mejor.
Cariños en un fuerte abrazo.
Kasioles
Pues le das un giro al concepto tradicional, el hogar parece algo con ubicación concreta y, después de leerte, me cuestiono ese concepto. Y recuerdo una canción de los 80 que se titulaba Wherever I lay my hat, there's my home.
ReplyDeleteUn abrazo, amiga, feliz de leerte de nuevo.
Parece el inicio de una historia.
ReplyDeleteMe gustaría saber más de la historia de Carla, me gusta ese nombre, y de Rogen. Si lograr probar que fueron incriminados, si descubren quien los odia.
Bien contado. Y me gustó la inclusión de ese dato histórico.
Un abrazo.
Muy bueno Myriam, el hogar se siente y puede ser una casa, una habitación, una persona, hay que sentirlo como tal.
ReplyDeleteBesos.
Precioso relato, Myriam. A veces olvidamos lo que es el verdadero hogar, ese sitio donde hay o ha habido abrazos, besos, cariño; ese lugar donde están nuestras cosas: libros, fotografías y recuerdos. Ese lugar donde no te sientes sola, donde sientes el calor del abrazo, muchas veces invisible, de los que nos quieren y nos quisieron.
ReplyDeleteBesos.
Muy bueno y como siempre nos aportas y enseñas algo nuevo. Además estoy totalmente de acuerdo contigo, el hogar lo hacemos las personas y en nosotros llevamos recuerdos y vivencias. da igual donde esté la casa que no es por supuesto el hogar.
ReplyDeleteUn abrazo.
Sí que es un estupendo relato.
ReplyDeleteUn beso.
Los dioses antiguos siguen vivos en quienes asi lo piensan...
ReplyDeleteUn abrazo