Plaza del mercado en Bergen op Zoom, oleo atribuido a Abel Grimmer, alr. 1590,
National Gallery of Art, Washington, EEUU
Sucede que este Hotel en el que me alojé en la plácida ciudad de Paises Bajos (Holanda), Bergen Op Zoom, es uno de los más antiguos de Europa, fundado en 1397 y no sólo está lleno de Historia. Les cuento:
Resulta que me hospedaba en una habitación muy cómoda pero siendo de hábito noctámbula, me gusta leer en la mullida cama hasta muy tarde. Una noche sentí ruidos y mi curiosidad me llevó a este salón que ven en la foto, en el que me encontré con mi colega El Taciturno, sí como lo oyen, nada más ni nada menos que con el príncipe Guillermo de Orange- Nassau quien con esmerado detalle y gran elocuencia me relató como de no haberse opuesto a Felipe II en un principio, pasó a ser líder de la revuelta de los Países Bajos septentrionales que desembocó en lo que más tarde -cuando hubo finalizado- dio en llamarse la Guerra de los Ochenta años (1), porque no estaba de acuerdo con la injerencia española en los asuntos locales y ni con la persecución de católicos contra protestantes, partidario como era de la libertad de credo. Me contó como esta ciudad había apoyado a los protestantes y a la rebelión, y de cómo le tenía especial cariño y de como le gustaba hospedarse en este añejo hotel. Hablamos hasta los primeros rayos del alba, nos despedimos y volví a mi habitación.
A la siguiente noche, acababa de acostarme ya para dormir, cuando oí ruido de voces en lo que parecía una acalorada discusión. Volví al mismo salón, llevando mi linterna. ¿Y a quienes me encontré esta vez? ¡a Alejandro Farnesio,! (III duque de Parma, hijo de Octavio Farnesio y Margarita de Parma. El mismo militar que luchó contra los Otomanos en la Batalla de Lepanto. Según me dijo luego, luchaba ahora en la guerra contra los rebeldes protestantes) y ¡a otro sujeto que no lograba identificar ! quien se presentó con una gran reverencia en la que besó el suelo con las plumas de su casco, como Ambrogio Spinola Doria, primer marqués de Los Balbases y primer duque de Sesto, condotiero italiano y noble de la República de Génova, que se desempeñaba como General al servicio de la corona española. Ambos, Alejandro y Ambrogio, discutían acaloradamente porque habían sitiado, sin éxito y en distintos años, en el contexto de esta guerra, la ciudad de Bergen op Zomm en donde todos nos encontrábamos ahora. Yo no podía dar crédito a mis ojos ni a mis oídos. Me parecía estar cabalgando entre los Siglos XVI y XVII y sin embargo, el ambiente del salón era moderno.
Pasó una noche más. Esta vez, Sentí pasos y como dos personas que corrían. Intrigada, me acerqué al salón y pude observar como el fanático de Balthasar Gérard perseguía a mi amigo El Taciturno, empuñando una pistola y le disparaba hasta matarlo.
Carta de recompensa de Felipe II a la familia del asesino de Guillermo de Orange
Después supe que Felipe II había ofrecido una recompensa de 25.000 coronas (2) a quien matara a Guillermo de Orange "peste del conjunto de la cristiandad y un enemigo de la raza humana", tal como el soberano lo llamaba. El asesino que en ningún momento mostró arrepentimiento, fue apresado juzgado y sentenciado a una tortura brutal antes de morir ajusticiado en la plaza del mercado de la icónica ciudad de Delft (3).
Vista de Delft por Johannes Vermeer, 1660-61
alojada en Mauritshuis, La Haya, Países Bajos (Holanda)
No sé ustedes, pero después de haber compartido mi estancia en el Hotel de Draak con tan ilustres huéspedes e incluso un asesino, decidí que en adelante me hospedaría en hoteles más modernos. (Nomas faltó que me encontrara con el prelado Sasbout Vosmeer, Obispo de Utrecht (1602-1614) quien robó de la tumba la cabeza de Gérard con la idea de que el Papa lo canonizara, cosa a la que este se negó).
Notas:
(1) Y en la consecuente independencia de la corona Española de las 7 provincias unidas (de los Países Bajos), 64 años después de la muerte de Guillermo, El Taciturno, por lo que se la conoce también como La Guerra de la Independencia de los Países Bajos.
(2) Felipe II finalmente entregó tierras y título nobiliario a la familia de Balthasar Gérad.
(3) Delft, una ciudad rodeada de canales en el oeste de los Países Bajos, es conocida como la base de fabricación de Delftware, cerámica azul y blanca pintada a mano. En su casco antiguo, el Oude Kerk medieval es el lugar de enterramiento del nativo maestro pintor Johannes Vermeer. Una vez que fue la sede de la casa real de Orange, la Nieuwe Kerk del siglo XV alberga las tumbas de la familia.
Me encantaría tener una charlita con estos personajes...y a esas horas:)
Aunque las comodidades estén en uno más moderno, pero seguro que con ese rancio abolengo no te consigues ninguno.
Me ha encantado este sabor rancio de otros tiempos ,visto desde esta actualidad, estos follones históricos.Chapó estimada My.
Besos voy a seguir leyéndoos
Myr 💋
ReplyDeleteMenos mal que comparten siglo, y no eran viajeros en el tiempo y las charlas pudieron ser mas o menos coherentes. Un buen hotel yo volvería a alojarme en el. Un abrazo
ReplyDeleteInteresantes e inquietantes encuentros en ese salón de hotel. Desde luego, tentador es… a pesar de los “riesgos”…
ReplyDeleteMuy bien llevado el reto, Myriam. Como ya nos tienes acostumbrados, maravillosamente enriquecedor.
Abrazo grande 💙
Si más paredes contarán sus historias, como las de tu antiguo hotel, de cuánto nos enteramos! Amores, pasiones, odios y desechos, todo intrincada mente relacionado bajo los mismos techos...algunos muy bien preservados! Muy interesante tu aporte hotelero, Myriam. Un abrazo
ReplyDeleteSiempre en un viaje en el tiempo.... apoyado por una ávida lectora....
ReplyDeleteGuerras en nombre de dios... y as´se hizo el mundo.
ReplyDeleteMe encanta la idea de dormir en lugares tan ilustres. Un relato maravilloso y como siempre un aprendizaje ejemplar de historia.
ReplyDeleteBss
Como envidio esa enorme imaginación tuya. Me ha encantado.
ReplyDeleteBesos
Que bien lo has relatado de tal manera que parece que estábamos ahí en ese mismo lugar escuchando las conversaciones de tan ilustres personajes. Desde luego los hoteles sus paredes están empapeladas de vidas ajenas. Un fuerte abrazo.
ReplyDeleteMe ha encantado la mezcla de historia y ficción, que además con el uso del narrador en primera persona, nos implica desde el primer momento.
ReplyDeleteBesos.
Me encantó la ambientación histórica. La de secretos que deben contener y guardar esas paredes centenarias.
ReplyDeleteUn abrazo y feliz jueves
Te equivocas era el hotel de Drac...cula !
ReplyDeleteabrazo.
Mi admiración siempre Myriam pr que siempre en tus relatos introduces pasajes históricos, obras de arte o algo que siempre tiene que ver con la cultura, además lo haces tan bien que no sólo el relato parece real, si no que parece como si el relato no tuviera razón de ser sin esos personaje u hechos adosados.
ReplyDeleteTe felicito con todo mi cariño-
Un beso grande.
Un hotel abierto a personajes de distinto siglos.
ReplyDeleteEntendible la resolución de alojarse en hoteles más modernos.
Un abrazo.
HOLA A TODOS: muchisimas gracias por vuestros comentarios. Gracias, Gracias y abrazos a todos y a cada uno.
ReplyDeleteVaya, todo un carnaval de personalidades historicas danzando impunemente por los corredores y salones de tan pintoresco hotel
ReplyDeleteMuy interesantes e inquietantes esas tramas de personajes y fenomenalmente ambientadas en la historia.
ReplyDeleteUn placer leerte
Beso
Me ha encantado tu relato Miriam. Y me ha divertido también. Felicidades. Un abrazo
ReplyDeleteMenudo vodevil de personajes, enmarcados en los datos de tus conocimientos históricos... Interesante, no, lo siguiente!! Gracias por participar y un gran abrazo
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