Convocatoria de Magade Qamar del Blog La trastienda del pecado
Casi
todas las personas que efectúan ejercicios espirituales quieren
elevarse al mejor estilo de Buda, realizando una anábasis que los lleve
rápido y directo al séptimo cielo, pero muy pocas se esfuerzan por descender a
los infiernos. Jesús y Dante Alighieri lo hicieron. También Orfeo para
buscar a su Eurídice. Y yo. Debo decir que es una experiencia tremenda la de llegar hasta lo más hondo de tu alma y conocer sus lados más oscuros,
más tenebrosos, y enfrentarlos. Suena aterrador, lo sé. Pero a la postre, el
resultado es sorprendentemente benéfico.
Corría
el año 2000 creo. Y sucedió después de 10 años de entrenamiento
espiritual. Descendí a un primer nivel el primer día, a otro el segundo día y a un último el tercer día. Las sombras avanzaban,
emitían quejidos, lamentos, gruñidos; se hacían grandes o pequeñas;
amenazaban envolverme. Yo las fui enfrentando una a una,
sin miedo; sabía que debía hacerlo y lo hice como quien debe cumplir con
una tarea obligatoria e impostergable. Ignoré el aire viscoso, enviciado, putrefacto y avancé.
Al tercer día, toqué fondo. Estaba en una habitación y había una puerta entreabierta de la que emanaba fuego como de un volcán en erupción. Y supe en ese instante que debía enfrentarme a Satanás, a esa oscuridad maligna que habita en cada uno de nosotros.
Vencí.
El ascenso a la superficie de la Tierra invocando a la Luz fue rápido e
indoloro, como un vuelo hacia arriba. Y el aire puro de un nuevo
amanecer llenó mis pulmones por completo; la Paz -en forma de energía
radiante- se había hecho en mí.
Es inquietante, pero nos deja el sentir de que hay maneras de meditar que nos elevan.
ReplyDeleteUn abrazo y feliz día
Me has hecho pensar y sentir esa curiosidad que tendrá que ser viajar a ese lado oscuro que todos ser vivo tenemos aunque sea muy al fondo ..Un tema muy, muy interesante ,.Un abrazo y muy feliz día.
ReplyDeleteMe temo que Satanás está más cerca y no hay que buscarlo tan lejos...
ReplyDeleteBuen relato, Myriam.
Un beso.
Un original planteo.
ReplyDeleteEnfrentarse a esa oscuridad propia, para ascender.
Y si es como en la Divina Comedia, afrontar eso de Abandonad toda esperanza, los que aquí entren.
Un abrazo.
Ejercicios espirituales de joven y eran reparadores, bajar a los infiernos a través de los libros y es atrayente, un submundo que cuando lo descubrimos lo localizamos en comportamientos cotidianos. Abrazucos
ReplyDeleteMe dá mucho miedo, pero me has hecho reflexionar sobre el lado oscuro que todos tenemos... es curioso como a veces necesitamos que nos inviten a pensar para hacerlo...
ReplyDeleteNo conocía tu blog, me gusta, con tu permiso me quedo por aquí.
Un saludo
Nunca he llevado a cabo esas experiencias de los ejercicios pero sí me he enfrentado a sombras y las he acogido. El camino a la luz es un camino casi tan duro como el de la oscuridad, solo que el alma no viene tan herida.
ReplyDeleteImpecable tu relato, Myr. Y como nombras a Dante, sí me ha recordado al descenso al infierno... incuso al de uno mismo.
Muchísimas gracias por apuntarte al reto de esta semana y sacarlo, como no podía ser de otra forma, de esta manera.
Un disfrute la lectura.... y la compañía.
Un beso enorme.
Una vez pusimos a intentarlo en un cumpleaños unos amig@s y yo invocando a los espíritus negros pero al final nos echamos atrás, porque era algo que nos produjo miedo.
ReplyDeleteInteresante tu aportación, en el relato juevero.
Un abrazo.
Un viaje interior en el que encontrarnos y con el que enfrentarnos, a veces, terrorífico, y otras, un remanso de paz...
ReplyDeleteMuy buena tu aportación, Myriam.
Un abrazo, y feliz noche 💙
¡Qué buen viaje de conocimiento y superación! Difícil no ceder a la desesperación al caer tan profundo.
ReplyDelete¡Un abrazo!
Como descansar cuando mi demonio personal combate en mi cada dia con mi angel protector !!!!
ReplyDeleteUn viaje a las profundidades de nuestro lado más oscuro difícil de realzar pero al final te encuentras con un resultado muy gratificante.
ReplyDeleteUn beso muy fuerte Myriam.
Que buen texto; todos debes en cuando tendriamos que mirar nuestro interior y exsorcisar nuestros demonios que estaran dormidos pero pueden despertar.
ReplyDeleteUn viaja interior muy sanador.
Un beso Myrian!!
Es mi primera vez en tu blog y me quedo para seguir leyendote.
ReplyDeleteBesos.
En todo hay una dualidad, así como existe la luz, también la oscuridad que siempre está asociada a algo malo. Es una visión distinta la tuya, pero creo que para conocernos bien y apreciar la luz, también hay que conocer el otro extremo, aunque en muchos casos de ese sitio no hay retorno.
ReplyDeleteGracias por tu comentario en mi blog.
Un beso dulce.
Un viaje inquietante, pero necesario...Conocer el lado oscuro y saber como enfrentar, nos hace más fuertes...
ReplyDeleteBesote
Siempre he creído que el mejor viaje es el del conocerse uno mismo, el que se hace al interior de uno mismo, incluyendo a las sombras y oscuridades que, como bien dices, todos tenemos.
ReplyDeleteUn beso.
Con qué maestría has narrado lo que sin dudas fue un verdadero camino de superación!. Lo más valioso es lo que más cuesta... gran lección para quien quiera aprender. Un abrazo
ReplyDeleteQuerida Myriam, a coisa mais difícil é nos conhecermos, e depois nos aceitar!
ReplyDeleteA briga conosco, aquela que cala profundo, jamais será em paz, difícil querer mudar. Mas diante de tantos exercícios, diante de uma forte vontade, isso pode acontecer.
Beijo, uma boa semana, cuide-se.
Mas o menos todos hemos hecho ejercicios espirituales en nuestra juventud, pero sin llegar a ser tan profundos como tu escrito.
ReplyDeleteUn saludo.
Hola a todos, quiero agradecer vuestros comentarios que trataré más tarde de responder individualmente. Vaya ahora por delante mi agradecimiento y abrazos a todos y a cada uno de ustedes.
ReplyDeleteDebe ser muy liberador deshacerse de demonios y cosas negativas. Y creo que hay que ser muy valiente para atreverse a hacerlo. Yo creo que me costaría pensarlo muy y mucho el hacer algo así.
ReplyDeleteBss.
Viajar al interior, inquietante a la vez que reconfortante
ReplyDeleteBeso
Efectivamente, todos estamos hechos de luces y sombras. Son esas sombras las que nos ayudan a perfeccionar el ser. Me gustó mucho.
ReplyDeleteSaludos.
El miedo al enemigo se combate peleando en guerras.
ReplyDeleteEl miedo de uno mismo es el más difícil de superar..
El miedo también es importante, no ha hecho avanzar y superarnos como especie...
Genial..
beso
S
Ya decía yo que eso de la meditación no era fácil, más bien hasta peligrosa. Menos mal que salió airosa. Muy bien. Besos
ReplyDeleteUn viaje a las profundidades más oscuras del interior personal, me ha impresionado. Lo he leído en libros, pero no creo que fuera capaz de llevarlo a la realidad. Me atemoriza. Aunque el resultado hacia la luz es extraordinario.
ReplyDeleteTe felicito.
Mi cariñoso abrazo, Myriam.
Maravilloso relato Myriam, el bien, el mal tan presentes y tan de actualidad siempre.
ReplyDeleteUn placer leer estos relatos de jueves.
Un abrazo enorme.