"Sonia", 1928, óleo sobre tela, por Christian Schaltz (Alem., 1894.1952)
Prometí contar sobre esta excelente exposición en el Museo Israel de Jerusalén que estará abierta al público hasta el 7 de Junio de 2016. La muestra es fruto de la colaboración de este museo con la Galería Nacional del Museo Estatal de Berlín y el Museo Israel de Jerusalén. El contenido de estas cinco entradas que dedicaré a esta exposición está basado íntegramente en la información ofrecida al público por la Curadora del Museo de Israel: Adina-Kamien Kazhdan y el promotor de arte Nationalgalerie: Dieter Scholz . Las fotos las tomé yo con mi móvil, sin flash por supuesto, y el material ha sido traducido del inglés por mi.
Para conmemorar los cincuenta años de
relaciones diplomáticas entre Alemania e Israel, surge la idea de montar esta
exposición en la que colaboran estrechamente
Jerusalén y Berlín, también con
ella se celebra el 50 aniversario del
Museo de Israel. La muestra "Crepúsculo sobre Berlín" está constituida por cincuenta obras excepcionales, en calidad de préstamo de la Nationalgalerie,
Staatliche Museen zu Berlin, y abarca un
período que se extiende desde el inicio
de la modernidad clásica alemana en 1905 hasta el inicio de la era de la posguerra en 1945.
El espectro de tiempo abarcado refleja
las cambiantes condiciones sociopolíticas y el efecto que esos cambios tuvieron en el arte,
constituyendo un gran abanico artístico de obras intensamente expresionistas que van desde críticas mordaces sociales de la
época de Weimar a las imágenes de angustia en respuesta al advenimiento del
nacionalsocialismo.
Durante la época nazi, el expresionismo y otras vanguardias modernistas recibieron –como sabemos- un duro ataque. La mayoría de los artistas cuyo trabajo se ve aquí fue marcada como arte "degenerado" y muchos se tuvieron que ir de Alemania, dando de esta manera origen a una diáspora de la creatividad de vanguardia. A pesar de los esfuerzos de los directores de la Nationalgalerie para proteger su colección, muchas obras modernistas fueron confiscadas bajo el Nacionalsocialismo del Tercer Reich y destruidas o vendidas en el extranjero. Algunas de las obras de arte que habían sido retiradas fueron devueltas al terminar la guerra; otras se volvieron a adquirir gradualmente durante las décadas siguientes. Durante el tiempo en que Alemania estuvo dividida, las colecciones de la Nationalgalerie de Berlín Oriental y Occidental desarrollaron diferentes perfiles: en la República Democrática Alemana los temas narrativos políticos dominaban, mientras que en la República Federal la colección se centró en la vanguardia, tendencias abstractas y en la autonomía del arte.
El acervo modernista de Nationalgalerie a medida que evolucionaba antes y después de la Segunda Guerra Mundial transmite tanto ruptura y como continuidad y refleja también un compromiso con la responsabilidad histórica para abordar el complejo pasado de la colección. Esta presentación de las obras maestras alemanas en Jerusalén, ilumina un periodo cultural profundamente influyente, rindiendo homenaje a un patrimonio artístico que finalmente prevaleció sobre la censura y la persecución.
Durante la época nazi, el expresionismo y otras vanguardias modernistas recibieron –como sabemos- un duro ataque. La mayoría de los artistas cuyo trabajo se ve aquí fue marcada como arte "degenerado" y muchos se tuvieron que ir de Alemania, dando de esta manera origen a una diáspora de la creatividad de vanguardia. A pesar de los esfuerzos de los directores de la Nationalgalerie para proteger su colección, muchas obras modernistas fueron confiscadas bajo el Nacionalsocialismo del Tercer Reich y destruidas o vendidas en el extranjero. Algunas de las obras de arte que habían sido retiradas fueron devueltas al terminar la guerra; otras se volvieron a adquirir gradualmente durante las décadas siguientes. Durante el tiempo en que Alemania estuvo dividida, las colecciones de la Nationalgalerie de Berlín Oriental y Occidental desarrollaron diferentes perfiles: en la República Democrática Alemana los temas narrativos políticos dominaban, mientras que en la República Federal la colección se centró en la vanguardia, tendencias abstractas y en la autonomía del arte.
El acervo modernista de Nationalgalerie a medida que evolucionaba antes y después de la Segunda Guerra Mundial transmite tanto ruptura y como continuidad y refleja también un compromiso con la responsabilidad histórica para abordar el complejo pasado de la colección. Esta presentación de las obras maestras alemanas en Jerusalén, ilumina un periodo cultural profundamente influyente, rindiendo homenaje a un patrimonio artístico que finalmente prevaleció sobre la censura y la persecución.
¨"Hombre caído" bronce, Alemania, 1915-6, por Wilhem Lehmbruck (1881-1919)
El artista fue herido en la Primera Guerra mundial y esta estatua representa el dolor que la Guerra causa en el hombre
"Entartete" Kunst, Arte "degenerado"
Como parte de
su política para regular todos los aspectos de la vida cultural en el Tercer
Reich, los Nacionalsocialistas
pusieron en escena en 1937 lo que se ha llamado "el ataque más
virulento vez montado contra el arte moderno " (*). El 19
de Julio de 1937 fue Inaugurado en Munich la Exposición denominada "Entartete Kunst" (Arte degenerado) que incluía más de 650 importantes pinturas,
esculturas, grabados y libros que habían sido confiscados por los Nazis a los
treinta y dos Museos públicos alemanes en las semanas anteriores. Las primeras
salas se agruparon de acuerdo a los temas -incluyendo artistas judíos, la burla
de la religión y la degradación de las mujeres- mientras que el resto de la exposición fue un compuesto de temas (tales
como el antimilitarismo) y estilos (como la abstracción) denunciados por los
nazis.
El objetivo de esta Exposición era educar al
público en lo que el Tercer Reich consideraba arte degenerado y, por lo tanto,
inaceptable para el pueblo
alemán. Ya en abril de 1933 más de veinte
directores y curadores de museos que no eran arios habían
sido despedidos de las Instituciones del Estado. Los artistas se vieron
obligados a unirse a grupos oficiales y cualquier "indeseable" fue despedido
de puestos de enseñanza en las academias
y organizaciones profesionales. Movimientos como el expresionismo, el cubismo,
el dadaísmo, el surrealismo, fueron vistos como intelectuales, elitistas y extranjeros. A pesar de la asociación de su
trabajo con las supuestas influencias judías y comunistas perniciosas, la mayor
parte de los artistas que fueron perseguidos no eran judíos (de los 112
incluidos en Entartete Kunst sólo 6 eran Judíos). Artistas que
trabajaron en los estilos modernistas fueron atacados independientemente de su
filiación o creencia política. La directiva emitida a la comisión que elegía
las obras para la Exposición definía como arte degenerado a todo aquel que
"insulta sentimiento alemán o destruye o confunde las formas naturales o simplemente revela una ausencia de educación y habilidad artística adecuada". Durante los cuatro meses que Entartete
Kunst se exhibió en Munich, atrajo a más
de dos millones de visitantes. Durante los siguientes tres años, que esta muestra viajó por toda Alemania y
Austria, y fue vista por casi un millón
más.
Como contraprestación una igualmente grande y mucho más profusamente presentada Exposición de Arte aprobado por los Nazis titulada Grosse Deutsche Kunstausstellung (la Gran Exposición de Arte Alemán) había abierto para inaugurar la Casa del Arte Alemán de Munich, el primer edificio de Museo erigido por los nacionalsocialistas. De acuerdo con informes periodísticos, sin embargo, el número de visitantes a esta exposición fue de sólo una quinta parte de los que acudieron a la popular exposición Entartete Kunst. Con escenas de género no inspirados y llenos de símbolos nazis, la Gran Exposición de Arte Alemán promovió ideales de belleza en el que los valores de las claves eran el "völkisch"(originado en personas históricas), la familia y la comunidad, el vigor físico y la destreza militar. Por lo tanto, se emuló el arte clásico y la raza aria se veneraba a través de obras monumentales realistas. La presentación simultánea de las dos exposiciones en Múnich proclamaba el triunfo del arte oficial sobre el arte "degenerado", para erradicar de una vez por todas, las diversas formas del modernismo que había penetrado en la escena del arte alemán desde 1910.
(*) Cita de Stephanie Barron, quien fue curadora de la exposición histórica "arte degenerado": El Destino de la vanguardia en la Alemania nazi, en el Museo de Arte del condado de Los en 1991; su ensayo del catálogo sirvió de base para este texto.
(Considerados por los
Nazis como arte degenerado: Max Ernst,
Franz Marc, Marc Chagall, Paul Klee, Wassily Kandinsky, etc. etc. etc)
Estupenda exposición.
ReplyDeleteNos has dejado con las ganas de poder verla in situ.
Un beso.
Cultura y totalitarismo se llevan mal. Si el arte no se convierte en la expresión ideológica del régimen, sencillamente se persigue y se prohibe. No interesa.
ReplyDeleteSaludos.
Ese "Sonia" parece pertenecer al mundo de "Cabaret".
ReplyDeleteMe encantaría ver esta exposición.
ReplyDeletebesos
Me encantaría verla, si fuera posible contigo para que me explicaras...jajaja
ReplyDeleteBesos y salud
Debe de ser una exposición excelente, gracias a ti he podido disfrutar de ella con las buenas explicaciones y fotos.
ReplyDeleteUn abrazo.
Una entrada extraordinaria la que nos traes hoy. El movimiento denominado Nueva Objetividad, que surgió en Alemania en aquellos años de entre guerras, llenó de arte el Berlín liberal y bohemio de la república de Weimar. Ese arte , que los nazis consideraron " degenerado" consiguió, tal vez, una mayor difusión gracias a ellos. Me encantaría ver esa exposición.
ReplyDeleteBesos Myriam
Me gustaría mucho poder verla. Impactante obras.
ReplyDeleteBesote
Un buen trabajo Myriam, mi enhorabuena. Llama la atención la estatua del "Hombre caído" y como no el colorido del óleo.
ReplyDeleteGracias por compartir.
Un abrazo.